Las mejores selfies de España: estos son los sitios más instagrammeables de nuestro país

Si te gusta viajar y compartir en Instagram los sitios más bonitos que has visitado, estás de enhorabuena: no necesitas irte muy lejos para triunfar con tus fotos. España es un país lleno de rincones muy instagrameables, a los que les basta un poquito de luz natural y un buen ángulo para regalarte la selfie perfecta.

Por eso, y aprovechando que ahora las salidas fuera del país (incluso fuera de la comunidad autónoma o provincia) están mucho más reguladas, en Yasss hemos hecho una lista con algunos de los rincones de España que te prometen la selfie de tu vida. Tú solamente tienes que preocuparte de llegar hasta allí, asegurarte de que la cámara de tu móvil está limpia y capturar el momento.

Al norte

La cornisa cantábrica tiene algunos de los paisajes más impresionantes de España, pero como en Yasss pasamos de recomendar hacerse una selfie en algún acantilado, nos vamos directamente a Las Médulas, en León. Esta antigua mina romana de oro a cielo abierto te dará todas las tonalidades de rojo y amarillo que puedas imaginar; si no las visitado nunca, quizás hasta te olvides de las fotos. Si subes unos cientos de kilómetros y cruzas la frontera con Galicia, podrás terminar la serie de selfies en el cabo Fisterra, considerado para los romanos el fin del mundo. Ahora, si te da pereza, seguro que de camino encuentras algún otro faro en esas costas cuyas vistas te quiten el hipo.

En Bizkaia, no te olvides de Gaztelugache (no lo hicieron los de Juego de Tronos) ni de la Selva de Irati, en Navarra, uno de los paisajes más espectaculares de la península. En Burgos, te recomendamos que visites (aunque sea en Google Maps) Orbaneja del Castillo, un pueblo castellanoleonés con casonas construidas junto a la caída de un arroyo que también corta la respiración. Y en Catalunya, no te pierdas ninguna playa ni pueblito de interior: todos tienen un encanto especial. Cuando llegues a Barcelona, aprovecha el Park Güell, la Sagrada Familia o el Tibidabo para sacar decenas de fotos.

En la zona centro

Seguimos nuestro viaje en dirección a la capital. En Madrid hay decenas de sitios que te prometen la mejor selfie: desde el templo de Debod (un santuario donado por Egipto y reconstruido en el centro de la ciudad, piedra a piedra) hasta el Palacio de Cristal, en el parque del Retiro, pasando por la terraza del Círculo de Bellas Artes, donde podrás posar con el skyline madrileño. Los murales de la Tabacalera también son un must para instagrammers.

Si salimos de la ciudad y nos vamos a Toledo (los miradores de la ciudad también te dejarán boquiabierto), no podemos dejar de recomendar los preciosos molinos de Consuegra, ubicados en el cerro Calderico. Se trata de unos molinos harineros que se conservan en perfecto estado desde hace siglos: para sacar la foto perfecta, olvídate de la regla de los tres tercios y dale protagonismo al cielo. El resultado es increíble.

Todo esto sin olvidar la espectacular ciudad romana de Segovia (por tu seguridad, lo mejor es ir en las estaciones de entretiempo), donde podrás capturar el alcázar o su famoso acueducto. Por su parte, en Cuenca disfrutarás posando contra el casco histórico o la ruta de las caras, ubicada junto al pantano de Entrepeñas.

De camino al sur

En Calpe, un pueblo costero de la Costa Blanca, destaca un edificio de colores vivos y con una estructura muy particular, conocido como la Muralla Roja. Sin embargo, en el edificio creado por Ricardo Bofill en 1973, viven vecinos que reconocen su hartazgo ante “la invasión” de instagrammers en sus espacios comunes. “De repente, te encuentras a 20 personas subiendo y bajando por dentro de la Muralla Roja”, reconocía uno de los propietarios en el Diario Información de Alicante, cansado de la situación. ¿Alguna alternativa? Benidorm siempre tiene mucha gracia: la cuenta del fotógrafo Roberto Alcaraz en Instagram, @benidorm_dreams, seguro que te da ideas.

Si pensamos en Andalucía, cuesta mucho elegir un solo sitio donde hacerse una foto. La plaza de España en Sevilla, los miradores del Albaicín, en Granada, los paisajes de Sierra Nevada, sus desiertos y playas… En este caso, nos quedamos con Córdoba: pasear por esta ciudad es conocer sonidos y colores que no habías visto en ningún otro sitio. Sus patios son una preciosidad, pero si además tienes la suerte de viajar en mayo, podrás disfrutarlos llenos de flores. La Fiesta de los Patios, este año retrasado hasta otoño por la pandemia, es Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Un caramelo para instagrammers, que también disfrutarán de las vistas desde Medina Azahara o la Mezquita.

Y, para acabar, ¿qué decir de los archipiélagos? Quienes tienen la suerte de vivir allí saben que no hay objetivo que pueda capturar la belleza de estas islas. Por decir tan solo un sitio, en Baleares recomendamos el faro de Cap de Barbaria, en Formentera, uno de los elementos más conocidos del paisaje español, y las fotos con el islote ibicenco Es Vedrá de fondo. Por su parte, si estás en las Canarias puedes aprovechar para hacer una foto en las piscinas naturales de El Caletón, con el océano de fondo, o visitar la Laguna de los Ciclos, en Lanzarote, un lago teñido de verde por el azufre, ubicado sobre el cráter de un volcán a pie de mar. Si te gusta la fotografía y los paisajes de contrastes intensos, este es tu sitio.