Christian Poincheval, un francés de 65 años, ha inventado lo que muchos llevamos siglos necesitando: unas pastillas para que los pedos huelan bien. De esto que estás en la discoteca y de repente un olor tremebundo a cloaca mezclado con aliento de zombie llena el ambiente… sí: es un pedo y en ese momento hubieras deseado que hubiera olido a rosas. Por fin llegó el día, ¡bienvenidas seáis pastillas para que los pedos huelan bien!
Christian cuenta que las pastillas son elaboradas 100 % con ingredientes naturales, como por ejemplo hinojo, algas o arándanos. Obviamente son aprobadas por las autoridades sanitarias y puedes hacerte con las tuyas por Internet. Sí, sí, como lo lees: te lo llevan cómodamente a casa sin tener que moverte del sofá. Según él, aportan un olor dulzón y, por si fuera poco, reducen el hinchazón y dolor de estómago. Pero por favor, ¡si esto es una maravilla de la ciencia señores!
Dice que le vino la idea a la cabeza mientras estaba de comida con amigos y de repente notó que el olor de los pedos era insoportable (no queremos saber lo que estaban comiendo). Entonces Christian pensó que había que hacer algo con esto así que empezó su investigación: encontró la fórmula que cambiara este olor por uno más agradable que nos recordara al chocolate o a las rosas. Fue en 2006 cuando lo empezó a comercializar y oye, no le ha ido nada mal.
Las pastillas las vende en un frasco de 20 por el módico precio de 20 €, ni tan mal. Dice Christian que normalmente hay gente que va en busca de estas pastillas para regalarlas a amigos de broma o para probarlas porque les entra la curiosidad.
Las pastillas se piden a través de su página web, una site bastante curiosa donde podrás ver todos los productos que tiene. Además de tener pastillas para personas… ¡tiene también pastillas para perros (aunque son bastante más caras que las otras)! Por otro lado también ofrece pastillas de diferentes olores según la época del año, por ejemplo: olor a violetas para San Valentín o a chocolate para Navidad, ¿cuál elegirías tú?
Un pedo está compuesto por nitrógeno (59 %), hidrógeno (21 %), dióxido de carbono (9 %), oxígeno (4 %) y el resto se reparte entre sulfuro de hidrógeno, caca y amoniaco. Y te preguntarás: de todo eso, ¿qué es lo que huele tan mal? Vale, realmente todos estos compuestos son inoloros menos el amoniaco, las heces y sobre todo el sulfuro de hidrógeno. Hay comida que es rica en sulfuro de hidrógeno y cuanto más comas de este tipo de comida, peor olerán tus pedos. ¿Quieres ejemplos? Allá van: habichuelas, queso, huevos, repollo, cebolla o los champiñones. Hay compuestos de estos alimentos que al cuerpo le cuesta digerir del todo y, aunque parezca mentira, la gente que come más verdura peor le huelen los pedos.
Otra razón por la que tus pedos puedan oler mal puede ser por alguna intolerancia alimentaria como a la lactosa, gluten o porque pueda ser que tengas algún virus en la tripa. Nuestro cuerpo no asimila estos compuestos en nuestro cuerpo, por tanto salen en forma de gases y claro, pasa lo que pasa.