No es la primera vez que ocurre. Cada vez que llegan unas fechas en las que es bastante común hacer pedidos a través de Internet (rebajas, Black Friday, Navidad...) aparece de nuevo esta estafa.
¿En qué consiste? Te llega un SMS de Correos en el que se especifica que hay un paquete tuyo retenido en aduanas y se adjunta un link en el que te pueden dar más información.
Lo lógico, ante un mensaje de este tipo y viniendo de Correos, una empresa de toda confianza, es que pinches para ver de qué se trata. Incluso si no has pedido ningún paquete, solo por la curiosidad de saber por qué te escribe Correos (¿y si es un regalo sorpresa?) puede hacer que abras ese link.
Se trata de un ataque de phishing, un ciberabuso que consiste en suplantar una identidad (en este caso, la de la empresa Correos) para conseguir datos personales de forma fraudulenta. Sí, solo te piden 1 euro, una cantidad que muchos ni se pensarían en abonar. Lo malo no es perder un euro, lo malo es que has dado los datos de tu tarjeta de crédito.
Rafa Laguna, un usuario de Twitter, ha explicado en un hilo qué puede pasar si caes en la estafa y pinchas en el enlace.
La página a la que llegas a través de ese link es falsa, a pesar de tener el logo de Correos. Mucha gente "pica" y da sus datos personales. ¿Y qué podría llegar a pasar? Rafa lo explica:
El timo de Correos está tan bien preparado que cualquiera podría que picar, no hay que ser muy ingenuo o estar muy desinformado para que te la cuelen.
Si te llega este mensaje y estás esperando un paquete, lo mejor que puedes hacer es confirmar la información con Correos directamente, bien a través del teléfono de atención al usuario o a través de sus redes sociales.
Pero si ya has abierto el link y has dado tus datos, lo que se recomienda hacer es informar a tu banco y solicitar una tarjeta nueva.
Hace unos meses conocimos el caso de Adolfo. Recibió un sms de su banco en el que se le avisaba de gastos inusuales, y poco después le desapareció una cantidad de dinero de su cuenta: "A pesar de que recibí un mensaje atípico del banco, pasé de él y seguí trabajando. Cuando me metí de nuevo a chequear qué tal iba de dinero para terminar el mes, me di cuenta de que alguien había suplantado mi identidad y había gastado más de 1.200 euros comprando en diferentes tiendas de segunda mano, Orange o Zara".
Gracias a la experiencia de Adolfo aprendimos que, si caes en una estafa de internet o directamente te roban dinero a través de tu tarjeta de crédito, debes hablar con tu banco y poner una denuncia en la policía.