Sabemos que Bad Bunny tiene flow, mucho flow, y estilo para llevar casi cualquier prenda (femenina o masculina) como si se la hubiesen cosido al cuerpo de nacimiento, y buen juego de piernas en la lucha libre, y claro, una cantidad de dinero al alcance de pocos mortales.
Con apenas unos pocos años de carrera y unas cuantas canciones míticas bajo la mano que empuña el micrófono, Benito Ocasio se ha convertido en uno de los máximos exponentes del género urbano mundial, y en paralelo a este carrerón en progresión geométrica hacia el firmamento (uno hecho de billetes), se ha embolsado unos cuantos millones de dólares. De puro talento, sí, de olfato, claro. ¿De suerte? También, la de ese momento dulce que vive el género en el que es rey.
Se rumorea que el conejo malo no es tan espléndido en sus lujos como el de otrxs compañerxs de gremio, empeñados en quemar la tarteja de crédito adquiriendo joyas que rozan el apocalipsis. Poco importa si adquiere costumbres de monje y todo lo arroja al abismo hondo de su cuenta del banco, cada vez más llena de dólares. El dinero fluye.
Pero, ¿cuánto dinero gana el conejo malo en 2023 por cada concierto que da?
Mucho han cambiado las cartas marcadas de su partida contra el mundo de unos años a esta parte. Antes de ser conocido y venerado, el cantante pasó épocas de vacas flacas empacando bultos en un supermercado, un trabajo tan digno como cualquiera, pero, convengamos, muy poco rentable en comparación con esa vida de aviones privados, piscinas climatizadas, mansiones con más habitaciones de las que necesitas y una masa enfervorecida que se rinde al paso de su flow. Con las cartas boca arriba, todo lo que queda es el dinero y las cifras, más y más altas a medida que se sucedían los grandes temas que forman su repertorio.
Así, sus cifras de facturación de 2022 probablemente sean relativamente bajas en comparación con las de 2023, otro año de éxito financiero y musical para el cantante, que se ha coronado como uno de los grandes triunfadores en la reciente gala de los Grammy.
Le ha debido de entrar la timidez con esto de ser el preferido de la industria, porque meses antes hizo la espantada en redes y cerró su cuenta de Twitter e Instagram, y cuando le preguntan por los ceros en su cuenta, cosa bastante frecuente, el conejo niega saber nada de la montaña de monedas de chocolate que lo elevan unos centímetros por encima del suelo. “Así es como funciono. No estoy pendiente de los números o de cuánto dinero estoy ganando”. Cuando el ahogo no aprieta y el jacuzzi de la terraza te llama para que estrechéis lazos de amistad, la modestia y la humildad es la menos radical de las virtudes.
Menos mal que contamos con algunos datos previos sobre su fortuna por parte de instancias autorizadas. El portal Celebrity Worth Net estimó su fortuna en 18 millones de dólares contantes y sonantes, y la revista Forbes ya lo incluyó el año pasado en su lista selecta de los artistas mejor pagados del mundo. Safaera, baby.
Pero entonces, ¿cuánto gana por concierto? Hablamos de una cifra apabullaba en 2022 y que se ha actualizado con su gira mundial, World Hottes`t Tour. Diversas fuentes han cifrado sus ganancias brutas por concierto en un millón de dólares (sí, has oído bien), sin especificar si esta cantidad es la que se queda limpia después de restar gastos de promoción, sueldos, staff y todos los gastos asociados.
Otros medios rebajan este número a una cantidad entre lo apolíneo y lo hedonista, es decir, mucho también: 500.000 dólares y unas cuantas exigencias de gran estrella: avión privado, escolta, hoteles de relumbrón que no bajan de las cinco estrellas y alas enteras cerradas en la que se despide a todas las camareras para que no haya filtraciones, con fotografías que acaban en los peores lugares de la red y alimentan los tabloides.