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Risas

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El satisfyer toma conciencia de sí mismo y se hace redes sociales: "Dime qué me harías"

  • El succionador de clítoris es el juguete sexual del momento

  • La fama del Satisfyer es tan grande que hasta le han creado una cuenta parodia

  • Los señoros siguen muy enfadados con la existencia del succionador de clítoris

El 2019 ha sido el año de votar sin parar, de tik-tokear todo el rato y de hablar del Satisfyer. Da igual si eres hombre o mujer, este año, en alguna conversación, ha surgido el tema: "eh, ¿has oído hablar del satisfyer ese? ¿sabes cómo funciona?".

La fama del succionador de clítoris ha traspasado todas las barreras de edad, sexualidad, y ahora también la de la conectividad. Y es que hemos encontrado una cuenta parodia de Twitter en la que se homenajea a este aparatillo que ha revolucionado nuestras vidas.

@unSatisfyer se cruzará en tu timeline de Twitter dejándote mensajes como estos:

¿Se puede molar más? ¡Sí! Este satisfyer es tan genial que hasta te ha preparado una buena playlist para que te relajes antes, durante, o después de pasar un momento especial con tu juguete sexual favorito. ¿Se puede ser más detallista?

La mejor respuesta al enfado de los señoros con el Satisfyer

Desde que el succionador de clítoris cobró relevancia en nuestras conversaciones cotidianas, dentro y fuera de internet, los señoros se han ido enfadando cada vez más con este juguetillo que solo vino al mundo a repartir felicidad.

Al parecer, hay cierto sección de la población masculina que percibe al succionardor de clítoris como una amenaza.

¿Por qué? Pues es difícil de entender, la verdad. Es como si un hombre se enfadase con un coche porque corre más que él. Con quien seguro que no se enfadan nunca es con el lavavajillas, pero claro, cuando hablamos del clítoris ahí les toca el orgullo... ¿a ellos? ¡Qué locura!

Ante estas circunstancias lo mejor es tomárselo con humor y no pararse a pensar que hay señoros tan machistas que se todavía, en 2019, se creen dueños del placer de las mujeres y se enfadan muchísimo porque la gente se compre juguetes para estimular su clítoris.

Por cierto, queridos señores enfadados con el Satisfyer: también existen los succionadores masculinos.