El pasado 27 de abril El País publicó que en un instituto de Móstoles los alumnos y la directora habían tenido que empezar a recolectar dinero para poder pagar las tasas de la la Evaluación de Acceso a la Universidad (EBAU) de algunos de ellos.
La directora del instituto envió a su equipo docente un correo electrónico para que los profesores que quisieran y pudieran aportaran algo de dinero a sus alumnos más desfavorecidos económicamente para que así estos pudieran hacer frente al pago de estas tasas.
Es más, según ha publicado El País, el mensaje que recibieron hace algo más de dos semanas los profesores era muy directo: "Este curso está siendo especialmente duro económicamente hablando para muchos de nuestros alumnos y sabemos a día de hoy que hay alguno de segundo de Bachillerato que no va a poder presentarse a la EBAU ni pagar el título si no le ayudamos económicamente. Por eso hemos decidido entre todos los miembros del equipo directivo que de manera voluntaria los profesores que queráis aportéis lo que cada uno considere. Dejaré un sobre hoy en secretaría".
Aunque no es la primera vez que hay alumnos que no pueden pagar los 170 euros que cuesta de media en la Comunidad de Madrid la prueba de Selectividad y el título de Bachiller, este año está siendo especialmente complicado pagar estos costes para las familias afectadas por la crisis económica derivada de la crisis sanitaria por la pandemia del coronavirus.
Es más, según CC. OO., de los 50.000 alumnos que estudian segundo de Bachillerato en Madrid, al menos 7.500 están en riesgo de exclusión social y, por tanto, les supondría un esfuerzo enorme pagar los 51,49 euros que cuesta el título de Bachillerato. Es más, los jóvenes que quieran estudiar en la universidad este no es el único pago que tienen que hacer, sino también el de unas tasas de 90 euros para presentarse al examen general o de 112 euros si optan por el específico.
Con motivo de lo ocurrido en este instituto de Móstoles, el Ayuntamiento de la localidad, formado por PSOE y Podemos, ha decidido que "asumirá el coste de las tasas de las pruebas de acceso a la Universidad de todos los alumnos del municipio que lo necesiten y cuyas familias no pueden hacer frente a los gastos dado su complicada situación económica", según ha publicado el Ayuntamiento en su página web.
Para que todos los alumnos del municipio tengan garantizado el acceso a la Universidad, desde Servicios Sociales y a través de ayudas de emergencia social, el Gobierno Local, asumirá el precio de las tasas.
Este es solo el primer paso de una iniciativa local que el Ayuntamiento quiere llevar a cabo, es más, este estudiará la fórmula para crear un fondo específico de ayudas que estará disponible para todas las familias sin recursos y permitirá cubrir el pago de tasas educativas como las de la EBAU.
Para la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CANAE) no son suficientes este tipo de iniciativas en localidades aisladas y pide la gratuidad de las tasas para poder realizar los exámenes de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad, ya que por sus "altos precios" hay muchas personas que no pueden examinarse y eliminar así el agravio que existe entre comunidades autónomas.
CANAE ha incidido en "la gran brecha existente" entre unas comunidades autónomas y otras, llegando incluso a triplicarse el precio de estas pruebas en función del territorio en el que se realicen.
"Las desigualdades se agrandan dependiendo de la CCAA donde se realicen. Un estudiante de la Comunidad de Madrid pagará aproximadamente unos 127,90 euros, mientras que en Comunidad Valenciana se paga en torno a 78 euros", expone CANAE.