El pasado 3 de enero, justo el día en el que hacía cuatro años de que le habían detectado el sarcoma de Ewing, Elena Huelva moría en su casa, agarrada de la mano de sus seres más queridos. Pocas horas antes, la propia Elena preocupó a todos sus seguidores con un tuit que sonaba a despedida y que decía: "Os quiero..." y, finalmente, se cumplieron los peores temores de todos los españoles: la muerte de una joven que ha sido ejemplo de vida, lucha y una positividad infinita.
Su hermana, Emi Huelva, con la quien tiene un gran parecido físico y que ha sido su 'sombra' durante todo el periodo de su enfermedad, dio su primera entrevista en el tanatorio de Sevilla donde velaban a Elena para coger el testigo de su lucha. Emi recordó lo necesario que es invertir en la sanidad pública y la investigación para que se evite la muerte de más jóvenes por un sarcoma que tiene solo un 62% de esperanza de vida: "Lo que importa es invertir en las investigaciones de estas enfermedades. Elena ha luchado cuatro años mostrándose cómo es ella. Sus ganas han ganado".
Precisamente, fue Emi la primera que le dio el último adiós a Elena en las redes sociales, con esta bonita frase: "Te amor, hermanita. Sígueme siempre, yo te sentiré" y, ahora, de madrugada, ha sido su madre, también llamada Emi, la que le ha dedicado una foto en la que sale dándole un gran beso. "Te amo por siempre, mi Helen del alma. Siempre juntas", ha escrito esta madre, que ha luchado durante cuatro años contra el cáncer al lado de su hija.
Es por todo este cariño que demuestra la familia (y todos sus amigos, conocidos y seguidores, que también la han llevado en su corazón) por lo que Elena, en sus últimas declaraciones, dijo que ella ya "había ganado al cáncer". Esa fue la frase que provocó la alarma sobre su estado de salud en el vídeo que la sevillana publicó a principios de diciembre de 2022, en el que anunció que su enfermedad había empeorado y se había extendido a la tráquea.
Las redes, además de llenarse de condolencias y mensajes de pésame, también han servido de altavoz para pedir más inversión en investigación y sanidad pública. Pablo Raez, Ozelot, Charlie, Elena Huelva... son ya demasiados jóvenes que han muerto por la misma enfermedad (y muchos otros, que no se conocen públicamente) y por ello el mundo exige menos recortes y más investigación sobre el sarcoma de Ewing.