Demi Lovato ha hablado, una vez más, abiertamente sobre el consumo de drogas. No obstante, es la primera vez que cuenta cuándo empezó a consumirlas y qué fue lo que le motivó a hacerlo.
La cantante, que a día de hoy tiene 30 años, ha desvelado en el podcast 'Call Her Daddy' que la primera vez que probó las drogas tenía tan solo 12 o 13 años. Es decir, era tan solo una preadolescente (y chica Disney) cuando empezó a consumir estas sustancias.
No obstante, antes de eso, ella ya le había robado en alguna ocasión alcohol a su padrastro de la nevera. Ahora, la estrella, que ha estado internada en varias ocasiones para desintoxicarse, está recuperándose poco a poco y se encuentra mucho mejor alejada de las drogas; algo que le ha costado muchos años conseguir.
La artista ha hablado en el podcast de las primeras veces que consumió drogas y cómo se volvió adicta a ellas cuando estaba entrando en la adolescencia: “Empecé a experimentar cuando tenía 12 o 13 años. Tuve un accidente automovilístico y me recetaron opiáceos. Mi madre no pensó que tendría que esconder los opiáceos a su hija de 13 años, pero en ese momento ya estaba bebiendo. Me habían acosado y buscaba una vía de escape”.
En ese momento, ella ya le había robado en más de una ocasión cerveza a su padrastro del frigorífico y se enganchó a los opiáceos: “A los 17 años, fue la primera vez que probé la coca y me gustó mucho. Luego me hizo ir a tratamiento justo después de cumplir los 18”, ha confesado también en esta entrevista.
Desde entonces, ha tenido que ir varias veces a rehabilitación; no obstante, su susto más grande por el consumo de sustancias fue en 2018 cuando sufrió una sobredosis que casi le cuesta la vida.
Ahora, desde principios de año, la cantante está trabajando para dejar de consumir cualquier tipo de droga, tal y como ella misma contó en una entrevista para la emisora de radio Boston, Mix 104.1: “Intenté fumar hierba, intenté hacer esto y lo otro… Y me di cuenta de que nada de eso funcionaba para mí. Lo que ha llegado a mi vida es la aceptación total. Acepto mi vida tal y como es, por lo que rara vez pienso en sustancias, lo cual es algo hermoso y algo que nunca pensé que me pasaría”.