Desde hace un tiempo te habrás dado cuenta de que tu bandeja de mensajes privados de Instagram ha cambiado y ya no tiene el aspecto clásico que conocías. Sobre las tres bandejas en las que almacenas los mensajes y las solicitudes habrá aparecido una nueva barra con las fotos de tus contactos y un ‘estado’ muy breve.
Pues sí: Instagram ha sorprendido a curiosos y extraños con una nueva actualización de sus funcionalidades. Lo ha hecho sin pasar por su clásico periodo de prueba, con esos pocos usuarios que prueban las futuras herramientas de la app antes de que sean implementadas para el público.
La nueva herramienta se llama ‘Notas’, y nos propone otra forma de comunicarnos. Más esencial, más sintética, mucho más rápida. Si los usuarios de la app la acogen positivamente, como parece que ya está sucediendo, promete dar mucho juego.
Te contamos cómo puedes aprender a utilizarlas rápidamente.
Instagram sabe que nuestra forma de comunicarnos cambia cada vez más rápido, y es por eso que se ha propuesto cubrir todas las formas de comunicación digitales posibles dentro del ecosistema de herramientas de la app. Su nueva herramienta, las ‘notes’, nos propone una alternativa a los DMs de nuestra bandeja de mensajes; una mezcla muy curiosa entre las stories y la esencia de una de sus competidoras: los tuits.
En esencia, esta nueva funcionalidad permite acceder de un vistazo a toda una galería de miniestados de nuestros contactos sin tener que entrar en su perfil o pulsar en su avatar para ver las historias, otra forma de hacer contenido más elaborada y que cuenta con sus propios trucos para alcanzar mayor cantidad de público.
Frente a ese registro en video y foto de la vida diaria que tanto tardamos a veces en idear, las notas cuentan, sintéticamente, algo mucho más rápido, y por supuesto admiten un abanico enorme de posibilidades expresivas. Podemos escribir un estado clásico (‘En el baño de la oficina, escondiéndome del jefe’), una frase motivacional para empezar bien el día (‘Vamos a morir todos, acuérdate de cerrar el grifo’), el lugar en el que estamos (Aquí, debajo del fregadero), una combinación de emoticones misteriosos. El lenguaje (de Instagram) es el límite. De hecho, millones de usuarios ya las están utilizando para una actividad más vieja que el primer fuego que alumbró la humanidad: ligar, hacer el delicioso, tirar los tejos veladamente al crush y otras formas del frotarse digital.
Cada nota admite un máximo de 60 caracteres, y solo podremos tener una cada vez. Otra de las particularidades de esta nueva forma de comunicar nuestro estado de ánimo es que no todo el mundo podrá saber qué es lo que dice nuestra nota. A diferencia de las stories, que llegan a todos nuestros seguidores y a los visitantes accidentales de nuestra cuenta, solo las cuentas que seguimos y los contactos clasificados como ‘mejores amigos’ en Instagram podrán leerla.
El funcionamiento de la nueva herramienta es tan intuitivo que ya hay millones de usuarios posteando estos pequeños estados de ánimo. Para crear tu primera nota, sigue estos pasos.