Hacer un directo en Facebook, dar like a una historia de Instagram, probar un filtro para sincronizar los labios en TikToK… Estamos tan acostumbrados a las herramientas nativas de las redes sociales para documentar nuestra sagrada intimidad que no solemos averiguar cómo se han creado ni por qué.
En la última década, plataformas como TikTok, Facebook, Instagram o Snapchat se han repartido distintos porcentajes de la tarta de usuarios enganchados a la vida digital. Lo más habitual es ver cómo estas compañías luchan a brazo partido para retener a sus audiencias con los métodos más peregrinos, bizarros o, simplemente, torpes. Basta que una de ellas saque una herramienta que se viraliza para que, pocas semanas o meses después, otra megacorporación clone ese recurso y le dé un nombre distinto. No se les da especialmente bien disimular, ni lo pretenden.
Hace apenas dos meses las redes sociales se volvieron locas con Be Real, una aplicación pensada para aquellos usuarios hartos de falsear su vida con brunchs de aguacate y selfies que escondían su acné, en suma, gente agotada de fingir un estado de dicha permanente a través de los filtros y los post motivacionales. Ahora es TikTok la que quiere reventar el mercado con Now, su particular forma de documentar nuestra vida y hacerla, en teoría, mucho más real.
Si eres de los que finge saber bailar un reto viral de TikTok sin descoyuntarte, o tienes tendencia a sacar a tu gato en tus directos para que parezca que tu vida es modélica y tu mascota te adora, y por supuesto no quiere matarte y deshacerse de tu cadáver, Now no es para ti. Tampoco lo era Be Real, la pionera en esto de tener una sola fotografía al día para contarle al mundo cómo nos va. Ambas aplicaciones son casi idénticas en su concepto y su mensaje: “Deja de fingir. Saca una foto y no te la trabajes con filtros. Tu yo real es este, sudando en el gimnasio, tiradx en el sofá sintiendo cómo te tritura la vida”.
Como decíamos arriba, no es que TikTok se haya trabajado especialmente el claim principal de esta herramienta copiada directamente de su competidora para retener usuarios a cualquier precio. Su concepto principal, la “llamada a la acción”, opera como el de su aplicación nemesis. De “Time to Be Real” hemos migrado a “Tiktok Now” o "Its Now time", que se traduciría en algo parecido a “Es hora de tiktokear tu vida sin épica, humano”.
La nueva herramienta de la plataforma funcionará con una notificación diaria. Con este aviso, en una hora aleatoria al día, se nos invitará a tomar una fotografía de lo que estemos haciendo y subirla a TikTok.
No será posible modificarla, añadirle filtros o falsear cualquier otro detalle, como hacemos en otras redes sociales para decirle al mundo que nos va de maravilla, que amamos la vida con locura (homicida), que nuestros semejantes nos parecen seres de luz.
En un alarde de “generosidad” (TikTok siempre está pensando en que lo pasemos lo mejor posible) se activarán ambas cámaras en nuestro teléfono, la delantera y la trasera. Habrá que tener especial cuidado con lo que estemos haciendo. El que avisa no es traidor. Lo siento. No haber intentado esconder un cadáver mientras Now se activaba y te grababa arrastrando ese saco de arpillera y tirándolo a las profundidades de un lago.
Por lo demás, la aplicación funciona por el sistema de reciprocidad. Solo podrás ver los ‘now’ subidos por tus amigos en TikTok si tú mismx haces tu propia fotografía y la subes. La localización también estará oculta, por aquello de no dar más pistas de las necesarias, si ese ‘now’ hace imposible ser “la mejor versión de ti mismo”.
Una vez se implemente y pase la fase de testeo en el reducido grupo de usuarixs que la están probando, encontraremos esta nueva opción en la barra de herramientas de TikTok como una pestaña destacada.