Si eres un millennial viejo seguro que recuerdas aquella escena de la película 'Algo pasa con Mary' en la que el personaje de Ben Stiller, nervioso por tener una cita con Mary, una chica preciosa que le vuelve loco, decide masturbarse antes de verla y con las prisas se deja restos de semen en la oreja. Que ella confunde con gel para el pelo. Y se engomina el flequillo.

La famosa comedia noventera solo está buscando la carcajada del espectador en una escena que hizo historia, pero este famoso gag parte de un hecho mucho más común de lo que creemos: masturbarse antes de una cita. Algunos piensan que, si sabes que en esa cita vas a tener relaciones sexuales, masturbarte te rebajará un poco las ganas para no estar tan impaciente. Sin embargo, otros piensan que si lo hacen se quitarán los nervios y la presión y funcionarán mejor una vez que llegue el momento.

Nos hemos propuesto analizar a fondo los pros y contras que puede tener masturbarse antes de una cita para que no te sientas tan rarito o rarita por querer hacerlo y elijas lo que puede ser mejor para ti. Ah, y sí, estamos dando por hecho que hay gente que lo hace porque es que es así, hay mucha gente que se masturba antes de un encuentro sexual.

Pues claro que no. Masturbarse está bien siempre que lo hagas porque te apetece y lo hagas en la intimidad. Masturbarse públicamente es delito, sí. Los demás no tenemos por qué enterarnos de que te apetece tocarte un rato.

Quizás algunas personas piensen que es absurdo masturbarse antes de quedar con una persona con la que vas a tener sexo, o antes de estar con tu pareja, pero lo realmente absurdo es pensar así. Hay muchos tipos de relaciones sexuales, y no es lo mismo aquellas en las que te dedicas al autoplacer que las que compartes con otras personas. Tener pareja o sexo con una persona no debería ser un impedimento para masturbarte cuando te apetezca.

La masturbación, por sí sola, ya tiene un montón de beneficios como aliviar los dolores menstruales, ejercitar los músculos de los genitales, hacerte sentir relajado, mejorar tus orgasmos. Hay estudios que dicen, además, que masturbarse es mejor que echarse una siesta a la hora de liberar estrés y desconectar para seguir trabajando.

Vamos a partir de un principio básico: lo que para una persona es buena para otra puede ser mala y viceversa. Es decir, que por mucho que nosotros ahora te vayamos a explicar la parte más científica del asunto, si a ti te sienta bien o te gusta masturbarte antes de una cita, pues adelante, y si a ti no te gusta nada, pues perfecto también.

Pero si tienes inseguridades o no te atrevías a probarlo, quizás esto te anime. Opiniones hay muchas, y es bastante común, sobre todo entre los chicos, aconsejarse hacerlo para evitar los nervios o la eyaculación precoz. También hay quien dice que es mejor no hacerlo para luego no tener gatillazos o para que no desaparezca el deseo y luego, cuando llegue el momento, ya no te apetezca.

Según la Sociedad Internacional de Medicina Sexual, para aquellos hombres que tengan erecciones suaves o dificultades para lograr una erección puede ser muy beneficioso masturbarse antes de una relación sexual con otra persona para facilitar una segunda erección, siempre que el periodo refractario, ese tiempo que necesita el pene para volver a ponerse erecto, no sea demasiado extenso en esa persona.

En cuanto a las mujeres, todo son pros cuando hablamos de masturbarse antes de un encuentro sexual. Masturbarse antes de la penetración reduce la tensión y ayuda a lograr niveles mayores de excitación. ¡Yasss!

Mucha gente cree que cuando quedas con otra persona la penetración es lo más importante. Pero no es así. Podéis hacer muchísimas cosas siempre y cuando os sintáis cómodos y os gusten. El fin último de una relación sexual con otra persona no tiene por qué ser la penetración o el orgasmo, sino pasar un rato juntos y divertirse.

Se tiende a pensar que la masturbación es algo que solo puedes hacer tú solo, pero no es así. Puedes mastubarte junto a otras personas o practicar la masturbación mutua. Pero, ¡cuidado! Quizás no masturbas tan bien como crees. Es importante la buena comunicación y preguntar a la otra persona qué es lo que le gusta y cómo le gusta que lo hagan. ¡Y a disfrutar!