Siempre será mejor preguntar que quedarse con la duda y en el sexo esto resulta todavía más importante. La comunicación es uno de los pilares esenciales, sobre todo si lo que buscamos es una relación sexual placentera y satisfactoria. Esto no quiere decir que no existan dudas al respecto o que tengamos que convertir a nuestro acompañante en fuente de información.
Así, nada mejor que tener algunas cosas claras, sobre todo si hablamos de sexo oral, que en muchas ocasiones continúa siendo un tabú en las cada vez más frecuentes conversaciones sobre el sexo con nuestras amistades. En torno al cunnilingus existen todavía muchos mitos, ciertas certezas que se mantienen y que no son tan verdaderas como pensamos. Estas siete las deberíamos desterrar cuanto antes.
No se pueden contraer enfermedades de transmisión sexual. Esto suena a verdad en la cabeza de mucha gente, pero lo cierto es que es falso. Practicar sexo oral sin protección aumenta el riesgo de enfermedades como el virus del papiloma humano, la sífilis, la gonorrea o el herpes genital.
A todas las mujeres les gusta. Como en todo en la vida, no todas las personas son iguales, por lo que generalizar nunca es una buena idea. Una vez más, la comunicación se convierte en la mejor aliada para estar seguros de que todo lo que está sucediendo es del agrado de todas las partes.
No hace falta usar protección. Tal y como señalábamos antes, el riesgo de contraer una enfermedad de transmisión sexual es real, por lo que lo mejor es utilizar siempre protección, sobre todo cuando se trata de una relación esporádica. Existen condones específicos para la lengua, así que no hay excusas.
Es necesaria una ducha vaginal antes. Esto no solo es falso, sino que además muchos ginecólogos desaconsejan las duchas vaginales, salvo que sea por recomendación médica. Suelen hacerse pensando que son una forma de limpiar exhaustivamente la zona, pero pueden arrastrar gérmenes desde el exterior y desencadenar una infección.
Solo puede hacerse en la cama. Si bien la postura más tradicional es la del misionero (que además puede ser muy placentera y favorecer los orgasmos múltiples o encadenados), no es la única, ni mucho menos. En el sexo la imaginación es casi tan importante como las ganas, el único límite es la comodidad y la flexibilidad de los implicados.
Con el cunnilingus no se llega al orgasmo. Por suerte, esto cada vez lo piensa menos gente, pues es una falsedad tremenda. El clímax se puede lograr de muchas maneras, con diferentes posturas y con prácticas muy variadas y el sexo oral es solo una de ellas. Todo dependerá, una vez más, de los gustos de cada persona (y puede que también de la habilidad).
¿No es romántico? Como tantas cosas en la vida… depende. En un momento de romanticismo, casi todo puede serlo. Si lo que se busca es romance, lo importante es el todo. Además, ¿quién ha dicho que no es un gesto de romanticismo proporcionar placer a tu pareja?