Semanas antes de que el público la convirtiese en la segunda finalista de Operación Triunfo 2018, mucho antes de su interpretación de ‘Toxic’ con Natalia Lacunza y antes incluso de entrar en la Academia, Alba Reche se convirtió en una de las concursantes favoritas de su edición. Fue en la gala 0, en la que se selecciona a 16 de los 18 finalistas para que entren en el formato, cuando le tocó reconocer delante de toda España que su novio y ella acababan de terminar la relación.
Antes de enfrentarse a la que sería la primera de muchas actuaciones en el escenario de Operación Triunfo, Roberto Leal, el presentador del formato, quiso preguntarle algún detalle sobre su vida personal: “Tú tienes fuera a tu familia, tienes fuera a tu pareja. ¿Tu pareja como lleva esto de si de pronto entras o no entras?”. Alba Reche, vestida de rojo y con el gesto repentinamente serio, miró al suelo. “No, no, no. Ya no hay”, reconoció, ante la sorpresa de Leal que aseguró que “no pasaba nada” y que “no sabía nada de esto”. “Lo importante es cómo cantes esta noche, Alba”, aseguró, ante lo que ella no pudo más que derramar un par de lágrimas y echarse a reír.
Cantó, por cierto, y su carisma y trabajo la llevaron directa a la final. Pero esa no fue la última vez que supimos del ex de Alba Reche durante el concurso.
Al contrario de lo que ocurre con otras concursantes de su edición, como Julia o Natalia Lacunza, de quienes sí podemos encontrar cuentas de Instagram y covers en YouTube previas a su paso por OT, de Alba Reche no se sabe demasiado. Más allá de que estudiaba Bellas artes y que tenía un canal donde subía versiones de canciones, no es fácil encontrar más información sobre ella, que probablemente borrase toda su huella antes de entrar en la Academia.
Su entrada en OT fue, precisamente por lo reciente de su ruptura, un poco complicada. Así se lo reconoció la propia Reche a otra de sus compañeras, la gallega Sabela, durante uno de los momentos más íntimos de su edición. Las dos concursantes aprovecharon un descanso en su concurrido horario para hablar de su futuro, del amor y de sus relaciones pasadas y presentes. Sobre la que acababa de terminar, Reche le reconocía a su amiga que no había sido “una separación normal”. “No tienes la oportunidad de decirle: ‘Oye, ¿estás bien?’”, expresaba Reche, entre lágrimas, ante la atenta mirada de los seguidores del canal 24 horas de la Academia en YouTube. “Es un poco impotencia. Confío en que estará bien, quiero creerlo. Pero no quiero que piense que le he olvidado o que no le he echado de menos por estar aquí currando”.
Sabela le preguntó entonces si su relación se había acabado “con vistas a que luego” hablasen, a lo que su compañera no supo qué responder. “No sé, la verdad, no se habló”, expresó. “Fue todo tan de golpe que no sé”. La gallega trató de consolar a su amiga haciéndole ver que “son dudas” que no iba a poder resolver durante el concurso, pero Reche no encontró calma en sus palabras. “No es lo mismo saber que puede estar esperándote fuera o haber cometido errores mientras tú estás aquí, es que directamente no está”. Más tarde, añadió: “Creó que éramos muy distintos y yo quiero hacer un montón de cosas”.
Ya dentro de OT, los fans del formato reconocieron en Alba Reche y Natalia Lacunza a las depositarias perfectas de sus fantasías románticas. Al shippeo le dieron forma en Internet, a partir de las muestras de cariño y evidente complicidad que las dos cantantes compartían, y lo llamaron ‘Albalia’. Para avivar ese fuego, los responsables de la Academia les pidieron que interpretasen juntas ‘Toxic’, de Britney Spears, un tema que interpretaron tan sensuales como compenetradas. A partir de ahí, el fenómeno fue imparable.
Aún hoy, después de que las dos artistas hayan desmentido su supuesta relación, hay decenas de cuentas en redes sociales dedicadas a ellas dos, así como otro puñado de fanfics (narraciones que los fans construyen ficcionando la vida de sus ídolos) que se pueden encontrar en plataformas como Wattpad.
“Yo me considero una persona cariñosa con la gente, lo fui con todo el mundo, pero supongo que al final la gente ve lo que quiere ver. Al principio fue incómodo porque era lo único que nos preguntaban, la gente es muy pesada”, reconocía Natalia Lacunza en una entrevista con El Español. “Éramos buenas amigas y punto, no había nada más allá de eso, si la gente quiere ver otra cosa no me puedo responsabilizar de ello”.