Estamos acostumbrados a que el trono de la música urbana tenga reyes y reinas cada semana; dinastías cambiantes, a base de temazos y sabrosura; aspirantes a la corona del baile y el flow victoriosos, o desterrados por nuevos competidores que les quitan el sitio.
Natti Natasha es una de las reinas indiscutibles de la música urbana y el pop latino. Si en el terreno musical conocíamos cada paso que da y hasta cómo es su impresionante casa y su matrimonio con el productor Raphy Pina, en lo referente a su vida personal todo tenía un aire bastante hermético. No se conocían apenas detalles de su vida antes antes de convertirse en una de las reinas indiscutibles del reguetón. Unas fotografías publicadas en 2020 han revelado parte de ese pasado que desconocíamos y han obligado a la cantante a confesarse sobre una época que, por suerte para ella, ya dejó atrás.
De la vida de Natti antes de ser Natti, como quien dice, solo sabíamos que, como migrante, había tenido que luchar muy duro para instalarse en los Estados Unidos. Vivió la precariedad y temporalidad de distintos trabajos antes de clavar el pie sobre la bandera de las barras y estrellas. De hecho, ni siquiera tenía papeles cuando aterrizó en los Estados Unidos para labrarse un nuevo futuro:
“Sí, estuve indocumentada. Realmente fue sin planearlo pues llegué con mi visa de turista y estando en Estados Unidos se venció”, le contó a la revista HOLA! USA en 2019. “Yo limpiaba en la casa donde me quedaba; esa era la manera de pagar, limpiando, o trabajando en una fábrica, y recuerdo que me ponían a hacer cosas diferentes: un día me tocaba en la línea de producción de cosméticos, otro envolviendo paquetes…”.
Lo cierto es que no se conoce exactamente la fuente de la filtración ni cómo llegaron a las manos equivocadas esas nuevas fotografías de la cantante que en 2020 pusieron patas arriba las redes sociales y los titulares en prensa. En cambio, la información no admite muchas dudas: Natti Natasha estuvo casada cuando tenía solo veintiún años y vivía una vida radicalmente distinta a la de ahora, con tanto éxito de público que resulta difícil de asimilar. La información la reveló en primicia el programa El gordo y la flaca, de la cadena Univision.
En dichas imágenes, la cantante aparece con semblante luminoso el día de su boda, junto a su pareja de entonces. Los dos muestran un ramo de flores a la cámara y sonríen como si fuera el día más especial de sus vidas. En otra fotografía, se besan entre risas. Spoiler alert: fue el día más feliz de su vida y no lo fue, porque la cantante ha confesado cuando le han preguntado que esa etapa está cerrada y que prefiere no hablar de ella más de lo necesario.
“Todo el mundo tiene un pasado, yo he tocado eso en otras entrevistas, pero por razones personales y para enfocarme en mi música no hablo de eso. Me casé bien joven, a los 21 años, me divorcié y seguí con mi vida”.
Para los fans de la cantante, todo han sido preguntas que no han sido respondidas. La principal y más importante: ¿Quién es ese misterioso galán con el que se casó y del que no se sabía nada hasta que dichas imágenes han salido a la luz? ¿Fue un divorcio amistoso? Desde las redes sociales se llegó a sugerir que esta unión fue por conveniencia, por un asunto de papeles, algo sobre lo que la cantante tampoco ha dado más información.
La reguetonera muestra cierta resiliencia en sus declaraciones y, desde que las fotos salieron a la luz, ha querido pasar página en cada entrevista en la que le han acribillado a preguntas. Una vez consiguió separarse, en efecto, se dedicó por entero a la música y luchó a brazo partido por labrarse un nombre en el mundo de la música urbana. No fue fácil. “Ahí fue que pude enfocarme para seguir luchando por mis metas y ahora mismo gracias a Dios puedo ser una imagen de superación para todas las chicas. En eso sigo y seguiré trabajando”, dijo en ¡HOLA!