Una de las cosas más maravillosas que tiene internet es la cantidad de vocabulario que se genera con su uso. Las nuevas palabras que se van poniendo de moda pueden ser más o menos útiles, pero no se puede decir que no son divertidas, ingeniosas, y, en algunos casos, necesarias. ¿Quién querría decirle a otra persona "hey, me apetece verte, ¿dónde andas?" cuando puede escribirle un simple Ontas? ¡Es que no hay color!
El lenguaje en redes sociales cambia casi a diario y no hay nada que divida y una más (a la vez, porque es mágico) a los usuarios que le uso de una palabra determinada. ¿No sabes lo que significa sco pa tu manaa a estas alturas? Estás fuérisima. ¿Todavía te tenemos que explicar lo que es un crush? Ok, boomer.
Que nos parezca lo más que cada día surjan conceptos nuevos no quiere decir que vayamos a muerte con cada uno de ellos. Aquellos que se usan como un insulto SIGUEN SIENDO UN INSULTO, e insultar a la gente está ya bastante pasado de moda, ¿no?
Es el caso de 'Charo', la nueva palabra usada por chicos jóvenes, presumiblemente, para calificar a las mujeres solteras o divorciadas, de más de 30 o 35 años, generalmente sin hijos y que parece una amargada. Así lo ha revelado María Sánchez Díaz, periodista que vive en Estados Unidos, en su cuenta de Twitter:
Je Suis Charo (yo soy Charo), decía en su siguiente tuit. Ok, Charo. Le contestaron.
Tampoco es que esto sea nada nuevo. El nombre puede que sí, pero la intención de señalar a la mujer "a la que se le pasa el arroz" y se queda "para vestir santos", no. No deja de ser una vuelta más de uno de los mitos machistas más antiguos: el de la solterona. La mujer que "ya no está en edad de casar" (es decir, de juntarse con un hombre), y se queda sola, así que "no sirve" (es decir, no va a ser madre) y además tiene carácter (así que, ¿quién la va a querer?).
En la anterior renovación de este precioso prejuicio machista tan presente en nuestra cultura, se medía la soledad de una mujer en gatos. Expresiones como "la loca de los gatos" o "qué sola está, ya va por el cuarto gato" solían ser bromas recurrentes dichas tanto por hombres como mujeres. Por cierto, que los prejuicios machistas suelen ser totalmente invent, sin ninguna base real, nada más que reflejo de los miedos y frustraciones de los tíos, porque es imposible ser la loca de los gatos ya que los gatos mejoran tu salud mental.
Como las Charos, "esas tipas de 40 años en adelante, tintes caoba, voz cazallera y chapas propalestinas y del "No a la guerra", esas que son acérrimas seguidoras de IU, o del PSOE en cualquier lugar de provincias y que buscan mantener su chiringuito", dice otro comentario que explica qué es una Charo.
Vamos, que una Charo es una mujer que no se ajusta al canon tradicional de sumisa, casada, callada, que lo da todo por su marido y es fina y delicada. Una mujer que prioriza sus deseos y sus necesidades por encima de los de un hombre. Vamos, lo peor.