La copa menstrual ha venido a nuestras vidas para quedarse: es cómoda, es práctica y se ha convertido en un producto cada vez más demandado, sobre todo por las adolescentes. Es una opción que respeta el cuerpo, no irrita y tampoco produce sequedad como otros métodos de higiene tradicionales. Bueno, y qué decir del medio ambiente, es la opción que más cuida del medio ambiente. Lo tiene todo, chica. ¿No te hemos convencido? ¡Pues quédate a leer!
Según dice el I Estudio sobre Salud Íntima de INTIMINA, un 57 % de las jóvenes dicen haber tenido alguna mala experiencia con las compresas o los tampones. De estas, un 37 % dicen que han tenido alguna reacción alérgica y un 65 % han tenido heridas o roces. Al fin y al cabo, la conclusión es que parece que la opción tradicional no es la mejor para algunas chicas y eso es un hecho.
Viendo estas estadísticas, no es nada raro que la copa menstrual ahora esté tan de moda, ha venido como agua de mayo para salvarnos a todas, amigas. Te vamos a seguir dando motivos: es elástica y plegable porque está hecha de silicona de grado médico biocompatible, que es un material no poroso que previene la formación de bacterias. Además, lo mejor de la copa es que duran muchísimo tiempo (hasta 10 años) lo que hace que te ahorres unos eurillos (que también es importante). En este sentido, si te da un poco de reparo lanzarte, algunas marcas como Intimina han lanzado escíficamente un línea de copas especialmente dirigida a adolescentes, como la Lily Cup One, perfecta para hacer una primera incursión en este mundillo.
Hay muchas chicas que quieren cambiarse a la copa pero no saben muy bien cómo funciona. Para eso estamos aquí, para solucionar todas tus dudas en un periquete, allá va:
Pues chica, ¡a cualquier edad! La puedes usar incluso desde la primera regla, aunque nunca hayas usado tampones y compresas. No notarás ni que la llevas puesta.
¡Pues claro! Puedes utilizar la copa menstrual independientemente de si has mantenido relaciones o no. Si lo que te preocupa es que se pueda dañar el himen, lo primero es que te olvides. Aunque se crea que el himen se rompe después de mantener relaciones sexuales por primera vez, lo cierto es que nunca desaparece del todo (OMG). Es un conjunto de finos pliegues de tejido que se desgastan y cambian de forma a lo largo del tiempo. Por eso, usar la copa no debería afectarte en absoluto.
Es sencillísimo. Cuando te la pongas un par de veces ya no querrás usar otra cosa. Además, es súper suave y flexible por lo que se adapta 100 % a ti. Lo primero que hay que hacer es relajarse e introducir la copa, ¿cómo? Vale, hay varias opciones: puedes subir la pierna al wc, sentada o de cuclillas, tú eliges, comodidad ante todo. Bien, cuando elijas la posición, la copa se puede introducir de dos maneras: pliege en C y pliegue en V, para que cuando entre se abra y se adapte a las paredes de tu vagina. Se produce un efecto vacío, que permite que no haya fugas de ninguna manera. Es parecido a como cuando te colocas un tampón, solo que no tan arriba. Es tan cómoda que apenas notarás que lleves nada puesto y no sobresale nada. ¡Di ciao a los molestos cordones de los tampones!
Pliegue en C:
Pliegue en V:
De ninguna manera puede escaparse nada. Una vez que colocas la copa, se hace un efecto vacío que es a prueba de fugas y además es misión imposible que en 12 horas se llene del todo. De todas formas, es recomendable que para aquellas que tienen el flujo abundante la vacíen dos o tres veces al día.
¡De ninguna manera! La vagina termina en el cuello del útero, así que la copa no se va a perder por ningún lado,así que tranqui. Además, el diseño de la copa está hecho para que no se vuelva a plegar una vez esté dentro ya que se queda rígida cuando la llevas puesta, sólo se pliega con las manos.
¡Por supuesto! No notarás que la llevas puesta y podrás descansar tranquilamente sin miedo de manchar las sábanas.
Puedes llevarla incluso 12 horas seguidas (increíble, pero cierto). Aunque a veces parezca que se manche mucha cantidad, la mayoría de las mujeres menstrúan desde el primer día al último entre 5 y 80 ml, que equivale a cuatro cucharadas de café. Es más, cuando vayas a vaciar la copa notarás que el fluido no ha pasado de la mitad.
¡Claro! Sí, si la has introducido correctamente, estarás bien protegida mientras estás a tope con el deporte. Puedes nadar, bailar, correr, practicar yoga… ¡Hasta bucear!
Fuera dramas, porque es más fácil de lo que parece. Siempre hay que limpiarla con agua caliente y jabón suave (ojo a esto) porque si usas un jabón fuerte puede causar irritaciones y no queremos eso. Para limpiarla más profundamente, al empezar y al terminar tu regla, hay que lavarla en agua hirviendo de 5 a 8 minutos. ¿Que te pilla fuera de casa? Don´t worry, la puedes limpiar con una toallita húmeda, papel higiénico o un poquito de agua si puedes y volver a ponértela como si nada.