No hace ni una semana que sabemos de su existencia y ya hay colas (jijiji) a la puerta de La Pollería para comerse un buen 'pollofre'. El nuevo local de Chueca ha revolucionado el concepto de dulce navideño uniendo dos conceptos que gustan a cualquiera: los gofres y las formas fálicas.
Vale, igual a TODO EL MUNDO no le gustan los penes, pero por eso han puesto el negocio en Chueca. Y les ha salido redondo: en un espacio pequeñito, decorado con "cuatro cosas", dos gofreras trabajando a toda máquina y una buena estrategia de marketing en redes sociales e internet... ¡lo han petado!
Los dueños del bisnes están encantados con la acogida. Yo misma acudí el pasado domingo a probar una de sus pollas y, la verdad, mentiría si dijera que no me gustó la experiencia. Un poquito violenta, quizás, de primeras, cuando el vendedor te pregunta: "¿cómo quieres tu polla?", pero pasado el primer susto, muy divertida, ¡y con final feliz! Los gofres están buenos, da igual la forma que tengan.
Aliexpress, el lado oscuro de Amazon. Cualquier cosa que imagines lo podrás encontrar en este portal de ventas. ¡Y también cualquier cosa que ni te imanabas que existía! Como la gofrera de penes.
Es verdad que es carita, porque cuesta unos cuatrocientos pavos, pero oye, para darte un capricho, y si eres muy entusiasta de los gofres con forma de pene, pues adelante.
Lo malo de todo esto es que es demasiado cara para regalársela en plan bromi a algún colega por el amigo invisible. Lo peor es que si la pides por Aliexpress va a tardar mucho en llegarte, y ya no tienes ninguna posibilidad de recibirla en tu casita antes o durante las fiestas navideñas.
Si aún así estás completamente decidido a hacerte con tu propia pollogofreta, ya sabes dónde encontrarla. Y si solo quieres probar uno para ver a qué sabe (y hacerte una foto divertida, ya que te has gastado los 3.80€ que cuesta el 'pollofre'), pásate por La Pollería.