"¡Deja ya de jugar y ponte a estudiar!", ¿no te han dicho esto alguna vez tus padres? Pues es verdad que algo de razón tienen. Los videojuegos han abierto una batalla campal entre hijos y padres desde siempre, pero en una familia estadounidense se ha enterrado el hacha de guerra: Dave Herzog de Massachusetts ha decidido que su hijo Jordan deje el colegio y se convierta en todo un profesional del Fortnite. ¿Cómo te has quedado?
Jordan es un chico de 16 años y se llama CRIMZ en el 'Battle Royale' de 'Epic'. Su padre, Dave, se dio cuenta que tenía futuro en esto: probó su primera consola a los 3 años y ya era todo un crack de los videojuegos y empezó a llevarlo a eventos de 'ESports' porque veía que toda esta industria de los videojuegos iba a ser algo potente algún día. Lo apostó todo para convertir a su hijo en alguien grande. ¿Cómo lo hace? No solo ha permitido que deje de ir al cole, sino que además le lleva la comida a su habitación para que no pare de jugar ni un momento.
Su padre, le ha impuesto una rutina de entrenamiento de Fortnite de 10 a 14 horas diarias que compagina con sus clases a distancia online (si se hubiera enterado que hay una empresa que te paga por jugar al Fortnite... ¡ya sería rico!). Jordan y su padre dieron una entrevista al periódico 'Boston Globe' y lo tiene muy claro: "Solo quiero ganar el suficiente dinero para no tener que trabajar el resto de mi vida". Sus padres han invertido mucho dinero para su futuro con los videojuegos, tanto, que se han gastado más de 20.000 dólares en equipo informático para su habitación y tenga el mejor material para jugar.
Siempre pasa que nunca llueve a gusto de todos y los profesores de Jordan no estuvieron de acuerdo desde el minuto uno, ya que insistían en que tenía que ir al colegio como todos los niños de su edad. Su padre insiste en la entrevista del 'Boston Globe', en que aprende más con los videojuegos que con los libros y se vio obligado a mandar al director del instituto de Jordan una carta en donde demostraba todos los logros del chico para justificar su decisión.
Dave asegura que Jordan ya lleva acumulados 60.000 dólares desde que empezó a jugar y se está preparando para la 'Fortnite World Cup' que se disputa este fin de semana y hay 30 millones de dólares en premios… ¡qué nervios! ¿Ganará? Si es así, todo el dinero será una inversión de futuro para su hijo, ¡y ya ha empezado! Le compró un Maserati (que pone CRIMZ en la matrícula) cuando tenía 14 años pero no podía conducir. ¡Ahora que tiene 16 ya puede hacerlo!
Veremos a ver si tanto entrenamiento intenso le ha servido para algo porque ha quedado finalista y este fin de semana se lo juega todo a una en la 'Fortnite World Cup'. ¿Le castigará su padre con volver al cole si no gana? Bueno, esperaremos nuevas noticias bailando al ritmo del 'Orange Justice', ¡yasss!