Las redes sociales se convirtieron en su modo de vida tras durante el confinamiento, cuando pudo dedicarse a subir una mayor cantidad de contenidos. Desde entonces la fama de Marina Riverss, cuyo nombre real es Marina Rivera, no ha parado de aumentar, así como el número de seguidores de sus cuentas de Instagram y TikTok.
Nacida en agosto de 2002, Marina ha conseguido conectar con toda una generación gracias a su contenido en el que no falta la moda y el maquillaje, los viajes y los looks de impacto, pero también los retos virales y momentos más divertidos en los que se muestra natural y sincera.
Comenzó en la red social que le dio la fama compartiendo vídeos desde clase, pero cuando le cancelaron las clases a causa de la pandemia le toco buscar un plan B, este fue más que efectivo, porque consiguió sumar cuatro millones de seguidores, que ahora ya son más de seis millones y medio.
El interés hacia su vida no dejó de crecer, desde sus relaciones sentimentales con otros influencers, como la que mantuvo con Daniel Marrero, al sonado final de algunas de sus amistades. También es conocida por hablar abiertamente de su bisexualidad, por su lucha feminista y por ser objeto de odio en las redes sociales.
Su vida es seguida por muchas personas y ella no duda en compartir algunos momentos con sus seguidores, como las fotografías de pareja que no borra a pesar de finalizar la relación o vídeos en los que comparte reto con su hermana, Gabriela.
Gabriela no es tan conocida en las redes sociales como lo es su hermana Marina, de hecho tiene un perfil mucho más bajo y su cuenta de Instagram es privada, pero casi 150.000 personas la siguen en su cuenta de TikTok. En ocasiones acompaña a su hermana en algunos de sus retos, pero no es demasiado frecuente verlas posar juntas.
Gabriela es casi tres años más pequeña que Marina, aunque ya quedó claro en un vídeo que compartieron en el canal de mtmad de Marina que esto causa ciertas discrepancias entre ellas. Gabriela nació en febrero en 2005, por lo que técnicamente serían dos años y medio, como ella defiende y no tres, como asegura su hermana.
Tienen una gran complicidad entre ellas, algo que quedó claro en el vídeo que compartieron. Se llevan bien, bromean y también discuten, algo bastante habitual entre hermanos. Las redes sociales también son testigos de ello porque, aunque no suelen compartir contenidos, de vez en cuando se dejan comentarios en sus respectivas cuentas.
Físicamente, son el día y la noche, mientras Marina es más morena de piel y suele llevar el cabello rizado, Gabriela tiene la piel mucho más clara y suele lucir el pelo liso, ahora ligeramente pelirrojo. Opuestas en muchos aspectos, han demostrado que tienen otras cosas en común, como las ganas de disfrutar de la vida, su amor por la música y su pasión por la moda. Marina tuvo que prometerle a su hermana un abrigo para que saliera en sus redes por primera vez respondiendo al ‘tag de la hermana’.