Loreen salió al escenario, cantó Tattoo e hizo historia. Antes de que ella consiguiera ganar dos veces el Festival de Eurovisión, las dos que su canción ha sido seleccionada para representar a Suecia, solo una persona antes que ella lo había conseguido, Johnny Logan.
La artista partía como favorita, estuvo en todo momento la primera en las encuestas y lo cierto es que nadie se sorprendió cuando fue su nombre el que quedó en lo más alto de la lista, para tristeza del candidato de Finlandia, que se convirtió en la gran sorpresa de la noche, aunque es cierto que su propuesta también era una de las que más gustaba, porque estuvo a punto de arrebatarle el título.
Lorine Zineb Nora Talhaoui, a quien todos conocemos por su nombre artístico Loreen, ya consiguió ganar Eurovisión en 2012. Su canción, Euphoria, no solo fue la propuesta que más gustó en Europa, también se convirtió en todo un temazo que ha estado sonando desde entonces.
Cuando ganó Eurovisión en 2012, Loreen ya llevaba tiempo buscando su lugar en el mundo de la música, trabajando y esforzándose para poder alcanzar el éxito. A lo largo del tiempo ha cambiado musicalmente, pero también su aspecto es otro. Así era Loreen antes de hacer historia.
Ahora Loreen se presenta ante el mundo con una imagen muy concreta, con una larga melena que antes llevaba lisa y que ahora luce ligeramente ondulada y, sobre todo, con un espeso flequillo que le cubre media cara. Sin embargo, esto no siempre ha sido así.
Cuando la artista comenzó su cerrera y daba sus primeros pasos en el mundo de la televisión, su estilismo era muy distinto, claro que hablamos del año 2004, cuando participó en el concurso Idol. Casi irreconocible, tal vez porque lleva la cara despejada, Loreen parece otra.
No hay ni rastro de su característico flequillo, luce el pelo mucho más corto y completamente rizado. Con su actuación consiguió el comodín del jurado, porque con el voto del público se quedaba fuera del programa, y, aunque no ganó, consiguió quedar en una meritoria cuarta posición. Tras el final del programa sacó un single, The snake, que fue muy bien recibido.
Tras este éxito le surgió la posibilidad de convertirse en presentadora y no la dejó pasar, aunque después optó por dejar de estar delante de las cámaras para trabajar detrás, como productora y directora, también como actriz de doblaje en películas de animación.
A pesar de todo, fue en 2017 cuando más sorprendió con su look porque, coincidiendo con la salida al mercado de un nuevo trabajo musical, Ride, un disco de estudio, la cantante optó por raparse por completo la cabeza. Parece que para su regreso a Eurovisión, algo que ha intentado en varias ocasiones, pero su propuesta no era ganadora, escogió recuperar su look más icónico, de cabello largo y flequillo, que ya se ha convertido en su seña de identidad.