La crisis del coronavirus nos ha obligado a todos a aprender a priorizar. Ahora, lo más importante es la salud y salvar vidas centra todos los esfuerzos. ¡Y con razón, por supuesto! Todas las medidas son pocas para evitar una catástrofe mayor. Los ancianos son los grandes perjudicados en esta situación, por su salud delicada y cómo les afecta el aislamiento. En la cara opuesta están los adolescentes, cuyas vidas también han dado un giro desde que se decretó el estado de alarma. Ya no tienen que ir a clase, pero eso no lo ha puesto todo más fácil. Al contrario, tienen muchas dudas sobre cómo terminará el curso y qué pasará con sus notas y han tenido que aprender, de un día para otro, a estudiar desde casa.
Aunque se ha pretendido que todo siga más o menos igual, los estudiantes saben bien que las clases virtuales no son lo mismo. No es fácil concentrarse en casa, algunos no tienen su propio ordenador o su propio espacio, y a eso hay que sumarle que no estamos tan bien ni al 100% por todo el tema de la cuarentena. Dormimos mal, tenemos sueños raros, aumenta la ansiedad y el estrés por la incertidumbre sobre el fin de curso....
Vamos, que no culpamos a Mateo de que haya "asistido" a clase completamente dormido. Mateo Peluso, un estudiante argentino, se conectó a una plataforma para hacer reuniones online completamente dormido. Y, por supuesto, sus compañeros de clase se rieron de él.
El vídeo del estudiante que dormía a pierna suelta fue compartido en Twitter por la cuenta @l_dorado02 y superó los 20.000 RT y 130.000 likes. En el vídeo (que puedes ver arriba del todo) se escucha al profesor decir "No me había pasado nunca, se me duermen en clase, pero en la cama no se me habían dormido nunca".
¡Mejor tomárselo con humor, por supuesto! Los profesores son los que mejore entienden ahora mismo a sus alumnos y saben que este está siendo un momento difícil para todos. Así que, si antes de la cuarentena ya había alguno que se quedaba sopa sobre el pupitre... ¡desde casa no iba a ser menos!
No obstante, aprendamos todos una lección de esta divertida anécdota: no estudiéis o trabajéis desde la cama. Si estáis cansados y el trabajo no es muy animado, ¡podéis quedaros dormidos!
¡Ah! Y otra lección más. Si te duermes en clase, luego no te quejes si te convierten en un meme.