Durante la época de verano los destinos más populares de playa suben cada año los precios de sus productos y servicios por la demanda que suelen recibir, haciendo que cientos de turistas gasten miles de euros en los meses de julio y agosto. A esta tendencia se ha sumado uno de los destinos más populares, por no decir caros, como Grecia por sus espectaculares vistas y playas, y ha sido una turista de Nueva York llamada Amber Pace la que se encargó de demostrarlo.
La turista de 25 años se encontraba de vacaciones recorriendo las islas griegas junto a su amiga llamada Aubrey . Una vez que llegaron a Mykonos, las amigas decidieron tomar unas bebidas y unos aperitivos en un restaurante llamado 'DK Oyster' conocido por sus elevados precios, pero las jóvenes nunca pensaron que la cuenta se trataría de unos 520 euros. Ha sido el periódico The Sun el que ha podido contactar con Amber quien relató lo ocurrido y se mostró indignada dejando en claro que nunca más volvería a aquel restaurante.
Pese a que la viajera explicó que en reiteradas ocasiones que le preguntaron al camarero por un menú de precios, este nunca les brindó la carta para que los pudieran ver. "Le dije a nuestro camarero tres veces 'por favor, asegúrate de que sea el de 17 libras, no quiero nada más que eso', y él seguía diciendo que entendía", explicó Amber quien también manifestó que la comida fue decepcionante: "Mis calamares fritos estaban gomosos y sin sabor, y las patas de cangrejo de mi amiga estaban excesivamente saladas".
Lo único que ordenaron fueron 2 bebidas y dos aperitivos que incluso no disfrutaron y pese a ello al llegarles la cuenta no daban crédito a lo que veían: 520 euros en total fue lo que tuvieron que pagar por lo consumido más un cargo del 10% por el servicio.
Tras lo ocurrido, Amber y su amiga trataron de arreglar la situación con el gerente del local pero su pedido fue ignorado y fueron culpadas por no leer el menú, incluso explicó que este fue "grosero, se burló de nosotros y no hizo nada al respecto". La turista juró nunca más volver al restaurante 'DK Oyster', conocido por sus precios desorbitados, así lo manifestó al periódico.