La inteligencia artificial (IA) promete ser la revolución tecnológica más importante desde que se inventó la informática. Lo está cambiando todo: cómo hablamos, dónde y cuándo nos relacionamos, aunque seguimos sin conocer las implicaciones de su llegada a nuestras vidas. Ese es el tema de la IA: que todos hablamos de ella sin tener muy claro de qué va.
A grandes rasgos, hablamos de la imitación de la inteligencia y razonamiento humanos por parte de una máquina o software: un campo de estudio que abarca desde el estudio de la informática al de la filosofía. Los informáticos Stuart Russell y Peter Norvig diferenciaron cuatro tipos de IA: sistemas que piensan como humanos, sistemas que actúan como humanos, sistemas que usan la lógica racional y sistemas que actúan racionalmente. Según explican, en esa distinción se encierra todo.
Pero la inteligencia artificial propone muchas preguntas, como ¿puede una máquina entender la ética? Y, en ese sentido, ¿qué tipo de máquinas podemos crear sin generar conflicto? Hablamos, por ejemplo, de robots sexuales con apariencia infantil, de los que ya hay noticias.
En el cine, la preocupación principal ha sido otra: ¿Cómo podemos saber que la inteligencia artificial que estamos creando no se va a rebelar? ¿Y si resulta que son más listos que nosotros y se nos va de las manos? Una duda que le surgió a Marvin Lee Minsky, uno de los padres de la IA, y de la que se hicieron eco decenas de directores después de él. Por eso, en Yasss hemos hecho una selección de cinco películas icónicas que plantean problemáticas con la inteligencia artificial, por si quieres verlas esta cuarentena.
Fue el primer filme que obtuvo la consideración de Memoria del Mundo por la Unesco. Esta cinta de Fritz Lang, que marcó casi todo el cine de Hollywood que ha venido después, describe un mundo distópico en el que un robot suplanta a un pacifista y lidera a la clase trabajadora hacia la revolución. Pero la cosa se desmadra y, entre gritos y golpes, los rebeldes se cargan la máquina corazón, de la que dependen todas las máquinas del mundo. Y ahí la cosa se complica.
Se trata de la primera cinta de la historia en la que aparece un robot, y refleja muy bien el miedo a la tecnología (y a depender de ella) que se tenía en la época y que hoy solo se ha agravado.
La cinta de Kubrick resultó ser tan incendiaria que, desde su estreno, dio lugar a muchísimas teorías conspiranoicas (quizás la más conocida era aquella que aseguraba que el director de '2001' era también el autor del vídeo que se mostraba la llegada del hombre a la Luna). Este filme sigue a un grupo de astronautas que se mueven por el espacio junto al superordenador HAL 9000, en un viaje que parece su muerte segura y del que no terminan de entender el propósito. La película aborda temas como la vida extraterrestre y la inteligencia artificial, para lo que fueron asesorados por expertos de IBM.
Para los que se queden con las ganas de más después de ver esta cinta, hay un ‘Odisea dos’, de 2010, dirigida por Peter Hyams y basada también en una novela de Arthur C. Clarke.
La película de Ridley Scott no solo indagó en las relaciones entre humanos y la inteligencia artificial: marcó el camino de una estética futurista y brillante. La película, basada en una novela de Philip K. Dick y ambientada a finales de 2019 en una Tierra postapocalíptica, plantea la existencia de unos robots idénticos a los hombres, pero superiores en fuerza y agilidad, a los que llaman Replicantes, y que se crearon a principios del siglo XXI como esclavos. El problema es que un grupito de Replicantes se rebeló, por lo que desde los humanos decidieron expulsarles del planeta.
Aquellos que no acataron la norma fueron perseguidos por un grupo especial de la policía, los Blade Runner. Uno de ellos, Rick Deckard, regresa años después a la Tierra con un encargo: encontrar y acabar con varios Replicantes rebeldes.
Las hermanas Wachowski dirigieron esta cinta de culto, una de las más taquilleras de la historia. En el escenario que plantea la famosa trilogía, casi todos los seres humanos han sido esclavizados por las máquinas y la inteligencia artificial, quienes obtienen su energía manteniendo a los humanos en suspensión dentro de una realidad virtual, un mundo conocido como Matrix.
Los pocos que no han sido capturados o que han sido liberados viven en la ciudad de Zion, en el subsuelo, y entran en Matrix de extranjis para salvar a otros seres humanos de su confinamiento. Uno de los rebeldes es Morfeo, quien cree firmemente en una profecía que anuncia la llegada de El Elegido, una persona que acabará con las máquinas y su opresión. Un día se fija en Neo, un hacker que vive atrapado en Matrix, dando lugar a todo tipo de peleas (¡y a la escena de la bala a cámara lenta!).
Después de una larga lista de películas que nos enfrentan con las máquinas, llegó Spike Jonze en 2013 con ‘Her’, una película que plantea la posibilidad de una relación de igual a igual con una máquina. En el filme, que está acompañado por una banda sonora preciosa, Theodore, un hombre solitario y destrozado por una ruptura que trabaja escribiendo cartas personales por encargo, empieza a desarrollar sentimientos por la voz de su teléfono, Samantha. Esta identidad femenina aguda, sensible y atractiva también comienza a desarrollar sentimientos por él.