Nos quejamos a todas horas de nuestros políticos ya sea a nivel nacional, regional o local. En ocasiones toman decisiones que no compartimos y, por tanto, expresamos este desacuerdo con nuestros amigos, en grupos de WhatsApp o a través de nuestras redes sociales.
Incluso llegamos a decir cosas tan "absurdas" como que un perro, un gato o algún otro animal en el poder lo haría mejor que el político en cuestión (de hecho, el director de cine Aki Kaurismaki lo cree). Pues bien, esto que podría parecer a priori una broma es lo que llevan haciendo en un pueblo de Estados Unidos desde finales de los años 90.
En el estado de Kentucky (Estados Unidos) hay un pequeño pueblo que se llama Rabbit Hash en el que viven alrededor de 500 personas. Desde hace más de 20 años la alcaldía de este pueblo no la ocupa una persona, sino un perro. Además, las elecciones locales se han celebrado ahora, coincidiendo con las presidenciales y el nuevo alcalde de Rabbit Hash será Wilbur, un bulldog francés de seis años.
Su dueña, Amy Noland, ha explicado en una entrevista a NBC News que "en Rabbit Hash nunca hemos tenido a una persona que actuase como alcalde". Esta tradición se lleva a cabo desde finales de los años 90. "Había un hombre llamado Don Claire que pensó que sería una gran idea elegir a algún tipo de animal, no necesariamente un perro, como alcalde de la localidad para un evento benéfico de la sociedad de historiadores de aquí".
Rabbit Hash es un pueblo pequeñito en el que viven menos de 500 personas, por lo que a priori no tendría que ser muy difícil de legislar, pero… ¿Tan fácil como para que un perro pueda ser el alcalde de esta localidad?
Según la dueña de Wilbur, Noland, la mayoría de los vecinos de este pueblo aman a los animales y por eso no les importa tener a uno de ellos al frente. Es más, ella no se queda atrás, ya que se dedica a dar refugio a los perros y gatos que se encuentra abandonados buscando nuevas familias que puedan adoptarlos. De hecho, Wilbur es un perro que adoptó hace apenas unos meses.
Todo esto empezó en 1998, cuando un hombre llamado Don Clare (el alcalde del pueblo en ese momento) puso en marcha un evento de recaudación de fondos para la Sociedad Histórica de Rabbit Hash en esta localidad. Fue entonces cuando pensaron que sería bonito y divertido que un perro, o cualquier otro animal, se postulara para el puesto de alcalde.
Como ese año Don era el alcalde, le pasó el testigo a su perro Goofy, el primer perro alcalde de Rabbit Hash y desde ese momento cada cuatro años, al mismo tiempo que la elección presidencial de Estados Unidos, el pueblo vota por un perro o un gato (ha ocurrido que, hasta ahora, todos los participantes han sido perros) para convertirse en alcalde.
Además, siempre se anuncia al nuevo alcalde en la tarde del día de la elección presidencial. Por eso la elección de Wilbur como nuevo alcalde del pueblo ha sido estos días. La Sociedad Histórica de Rabbit Hash contó los votos y anunció a Wilbur Beast como el ganador. En segundo lugar quedó Jack Rabbit, un buen amigo de Wilbur que será nombrado "Embajador de Rabbit Hash".
La "toma de perrosesión" será en enero, al igual que la del Presidente de Estados Unidos. A este evento de gala asisten también los animales elegidos como alcaldes y embajadores en años anteriores.