A menudo, cuando vamos solas por la calle y es de noche pasamos miedo. Es muy probable que si eres una mujer, en más de una ocasión hayas tenido que enfrentarte a escuchar por la calle los "piropos" indeseados de hombres que pasaban por tu lado en lugares inhóspitos y oscuros en los que no te sientes segura.
No obstante, esta inseguridad no la sentimos solo caminando por la calle, sino también cuando tenemos que ir solas dentro de un taxi y no sabemos si este taxista va a respetarnos o no, va a hacer comentarios que nos incomoden sobre nuestro físico o nos va a llevar hasta nuestro destino sin ningún inconveniente.
Pues bien, precisamente esta inseguridad fue la sintió Sara, una joven que se ha vuelto muy viral por el vídeo que grabó mientras viajaba dentro de un taxi en el que no se estaba sintiendo del todo cómoda por algunos de los comentarios que había hecho el conductor. Es más, ha sido Sara la que ha colgado este vídeo en su perfil de TikTok donde lo han visto ya más de cinco millones de personas y acumula miles de comentarios.
Como Sara no se encontraba cómoda dentro del taxi por los comentarios que había hecho el conductor, ya que su casa está en medio del monte "y usted estaba encantado con que esta urbanización era muy silenciosa y alejada del pueblo. Ha sido muy bueno, pero me he cagado viva, mejor prevenir", ha escrito la joven junto al vídeo viral.
En este vídeo, Sara le cuenta al taxista una historia inventada en la que asegura que estuvo en la cárcel por romperle el coche a otro taxista: "Menos mal que me has tocado tú, porque es que una vez me tocó un taxista que madre mía era un cerdo y estuve un mes y medio en prisión preventiva por romperle todo el coche".
No obstante, eso no fue todo, ya que continuó con su historia para añadir: "Casi lo mato, sí, porque me decía groserías y hace como siete meses que he salido de prisión". Ahora, han sido muchas las personas que han empatizado con Sara y que creen que esta actuó de la mejor manera posible, aunque no todo el mundo lo comparte: "Vale que tengamos miedo, pero meterle miedo a un pobre hombre que sólo intenta hacer su trabajo me parece un poco too much".
Por si esto fuera poco, ha grabado un segundo vídeo en el que da más detalle sobre lo ocurrido, cuenta que estaba sufriendo bastante ansiedad en el momento en el que se subió al taxi y que lo primero que se le ocurrió fue inventarse que había estado en prisión para salir del paso, una estrategia con la que ella se quedó más tranquila y llegó a casa sin ningún problema.