Una alumna, condenada a ocho meses de prisión por haber manipulado un examen durante la revisión

La tentación de hacer trampas en un examen es sugerente. Las horas de estudio acaban por hacer mella, y no es extraño acabar cayendo en esas malas artes que son las chuletas y otras formas de copiar y engañar en este tipo de pruebas. Son prácticas muy extendidas, pero con las que hay que tener cuidado. Más ahora, después de conocer que una estudiante ha sido condenada en Madrid a una pena de prisión por manipular su examen durante la revisión.

Una alumna del grado en Medicina en la Universidad Autónoma de Madrid ha sido condenada por delito de falsedad en documento oficial al haber manipulado un examen durante la revisión del mismo. La pena impuesta a la estudiante es de ocho meses de prisión e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante lo que dure la condena. Además, está obligada al pago de una multa de ocho meses, con una cuota diaria de seis euros.

La joven había interpuesto recurso contra la sentencia del Juzgado de lo Penal número 19. Pero ahora la Audiencia Provincial de Madrid acaba de desestimar el recurso, ratificando la pena.

Ocurrió durante el curso 2018-2019, cuando la alumna se sometió al examen de la asignatura ‘Anatomía III: Órganos de los Sentidos y Neuroanatomía’. Tras suspenderlo, acudió a la revisión de la prueba, que tuvo lugar tres semanas después, a finales de mayo de 2019.

Según el texto de la sentencia, la estudiante alteró dos de sus respuestas erróneas que había contestado en el examen, erróneas, marcando las opciones correctas en cada caso. Cambió una F para que pareciese una V en una de las preguntas de la prueba, y añadió una opción en otro ejercicio de respuesta múltiple.

Así se pudo pillar a la alumna que manipuló su examen en la revisión

Pero, ¿cómo se pudo llegar a detectar el fraude? Como se explica en la sentencia, la profesora detectó un comportamiento “extraño” de la alumna durante el examen. Según ella, intentó copiar a algunos compañeros, lo que provocó que la separase de estos.

Ante estos comportamientos, la maestra decidió fotografiar el examen antes de que se produjese la revisión. La comparación con el documento que le devolvió la alumna tras la revisión permitió identificar la alteración. Varios profesores ratificaron la versión de la profesora, mientras la alumna esgrimió haber sido víctima de animadversión por parte de la docente, después de haber denunciado en cursos anteriores que se hubiesen manipulado los datos de sus notas.