Hay historias que nos dejan sin palabras y la que ha contado Myriam es sin duda una de ellas. La joven, ha hecho un hilo en su perfil de Twitter que se ha vuelto muy viral, acumula más de 24.000 likes, y en él cuenta cómo terminó viendo a dos personas manteniendo relaciones sexuales dentro de un coche en un parking público.
Myriam, ha empezado presentando a su perra, personaje principal de esta historia, y ha explicado "la relación que hay entre que mi perra sea especialita para cagar y que acabe de ver a dos personas follando". Para entender esta historia, hay que saber que, aunque no le avergüence "tirarse pedos en la cara de mis amigas, pero lo de cagar cuando hay gente cerca lo lleva reguleras. Ya puede estar asomándole la tortuga, que ella aguanta como una campeona hasta que lleguemos a SU ZONA SEGURA".
Pues bien, su zona segura está muy apartada del resto de la gente, concretamente "es el parking del polideportivo del pueblo. Está entre a tomar por el culo y buf qué pereza ir hasta allí. Más o menos", asegura.
Myriam tiene muy en cuenta los gustos de su perra y es por eso que la lleva a ese parking cada noche, por muy lejos y apartado que esté: "No es raro que haya algún coche, así que no me he sorprendido cuando mi perra se ha puesto a cagar justo al lado de uno".
No obstante, la zona está muy oscura y es por eso que no se fijó en el interior del vehículo, hasta que las dos personas que se encontraban dentro en ese momento encendieron las luces, aún teniendo los cristales empañados, un detalle del que se ha dado cuenta cuando "las dos personas que había dentro han decidido encender la luz interior".
Fue al encender la luz cuando Myriam se dio cuenta de que había dos personas dentro del coche manteniendo relaciones sexuales: "ME HE ENCONTRADO CON UNA PERSONA ENSARTADA EN OTRA PERSONA, UN PINCHO MORUNO SEXUAL EN EL ASIENTO DELANTERO (¿por qué no estaban detrás?, no me lo explico)", se pregunta la joven.
Aunque cruzó la mirada con estas dos personas, no pudo moverse y se quedó plantada al lado del coche porque su perra seguía haciendo caca: "HE TENIDO QUE ESPERAR COMO UNA JODIDA ACOSADORA A QUE ACABARA".
Lo único que puso hacer ella en ese momento fue darse la vuelta para tratar de darles algo de intimidad, mientras que su perra seguía "DESHACIÉNDOSE DEL PESO EXTRA SIN SABER QUE SU MADRE ESTABA VOYEURIZANDO AL PRÓJIMO SIN QUERER Y PASANDO TREMENDO BOCHORNO".
Claro, al estar las ventanillas del coche por encima del suelo, es muy probable que las personas que se encontraban en ese momento dentro del vehículo no se hayan dado cuenta de que había un perro y hayan pensado que "ESTABA AHÍ PARA TOMAR LA FRESCA A SU LADO MIENTRAS COPULABAN".