Simone Biles, que está considerada como una de las mejores gimnastas de todos los tiempos, sorprendió a todo el mundo al anunciar su retirada de todas las pruebas en las que se esperaba su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, a excepción del ejercicio en barra de equilibrio, en el que ha conseguido la medalla de bronce para Estados Unidos, quedando tercera tras las chinas Guan Chenchen (oro) y Tang Xijing (plata).
La estadounidense, cinco veces campeona mundial y medallista olímpica, fue muy clara con los motivos de su retirada: necesitaba cuidar de su salud mental. "Nunca me había sentido así en una competición. He intentado salir a disfrutarlo, pero en cuanto he salido a la pista he sentido que no estaba preparada mentalmente. Así que he dejado que ellas [sus compañeras de equipo] se encargaran del resto y me he centrado en mí misma", explicó Biles tras decir adiós a la competición por equipos justo después de su primer salto.
No es la primera vez que una gimnasta sufre la presión de la excelencia olímpica (están ahí las historias de Julissa Gómez, Christy Henrich o Elena Mukhina), pero sí que es la primera ocasión en la que una atleta que está en lo más alto decide parar para cuidar de su salud mental y lo hace público sin ningún tapujo. Esto ha abierto un gran debate en el mundo del deporte y en la sociedad en general, y han sido muchos los que han agradecido a Biles "su valentía" para alzar la voz y visibilizar esta realidad.
Además de miles de anónimos en todo el mundo, también le han agradecidido su franqueza y honestidad famosos de distintos ámbitos, como la cantante Taylor Swift, que ha prestado su voz para un spot de la cadena NBC, que tiene los derechos de emisión de los JJOO en Estados Unidos. En él, aparecen varias imágenes de Biles en acción mientras la artista reflexiona sobre el mensaje que su compatriota le ha lanzado al mundo.
"¿Qué queremos de nuestros héroes? ¿Qué esperamos de ellos? ¿Qué necesitamos de ellos? ¿Qué sucede cuando nos sorprenden? Cuando tienes la atención del mundo, todo lo que haces adquiere un significado mayor. Puede ser una gran carga o puede convertirse en una oportunidad para cambiarlo todo", comienza diciendo Swift, para después analizar el gesto de Biles.
"A lo largo de la última semana, su voz ha sido tan importante como su talento. Su honestidad es tan hermosa como la perfección que había tenido durante mucho tiempo su propia firma. Ella es perfectamente humana, y eso es lo que hace que sea tan sencillo llamarla heroína", concluía la cantante de 'We Are Never Ever Getting Back Together'.
El anuncio fue publicado en Twitter, en la cuenta de NBC, para promocionar la vuelta a la competición de la atleta estadounidense, que participó en el ejercicio de barra en equilibrio, por el que ganó una medalla de bronce. El tuit recibió casi 70.000 'likes' y llegó a la propia Simone Biles, que le dio las gracias a la cantante: "Estoy llorando. Qué especial. Te amo".
Al leer su mensaje de agradecimiento, Taylor Swift quiso responder a Biles y lo hizo a través de Twitter, donde le dedicó otro emotivo mensaje: "He llorado viéndote. Me siento muy afortunada de haber podido verte todos estos años, pero esta semana has dado una lección de inteligencia emocional y resiliencia. Todos aprendemos de ti. Gracias".
La franqueza de Simone Biles le ha valido los aplausos de mucha gente, pero también han triunfado los gestos de otros atletas olímpicos, como el de Adriana Cerezo, que consiguió la medalla de plata en la final de taekwondo femenino (categoría 49 kilos) y que dio una lección de compañerismo y deportividad tras caer ante la tailandesa Wongpattanakit, o el de Tom Daley, que dio un reivindicativo discurso sobre la representación del colectivo LGTBIQ+ en los Juegos Olímpicos tras ganar la medalla de oro en la prueba de trampolín de 10 metros sincronizado.