Desde hace unos meses parece que ya no entendemos nada o que cada vez nos enteramos de menos cosas. La expansión del coronavirus nos ha obligado a adaptarnos a tantos cambios, que se nos hacen un poco de lío las normas y más si estas vienen con un código abreviado como el que manejan las autoridades sanitarias.
Es cierto que no sin esfuerzos hemos entendido la diferencia entre brote, epidemia y pandemia, que ya nos hemos acostumbrado al nombre oficial de este coronavirus, el SARS-CoV-2 y que en estos últimos meses nos hemos sacado casi un título para distinguir los tipos de mascarillas. Y cuando todo eso lo tenemos ya controlado, llega de nuevo la OMS (Organización Mundial de la Salud) y nos hace otro cambio: se acabaron los saludos con el codo, mejor ahora llevarse la mano al corazón.
Pues con todo esto ya digerido y superado, no quedan ahí los códigos a manejar. El método que a partir de ahora nos tenemos que grabar a fuego y utilizar con soltura para entendernos es el de las '3 C', que llega también directamente del propio Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS. Esta teoría es un resumen de lo más fácil para que todos tengamos en cuenta el esquema de lo que no se debe hacer o, más bien, de lo que hay que evitar siempre para no contagiarse.
¿Cuáles son esas 3 C que componen la regla y que debemos a toda costa evitar? La OMS ha pedido expresamente a la población mundial evitar estas 3 C para prevenir el contagio y la propagación del coronavirus. Estas son los lugares Cerrados (closed spaces), lugares muy Concurridos (crowded places) y mantener casi exclusivamente Contactos Cercanos (close contacts). Aspectos fundamentales en los que nos debemos enfocar para no ser más susceptibles al contagio.
Con este nuevo camino (más bien atajo) para no estar cerca del coronavirus, se sigue ampliando la lista de códigos que se han ido imponiendo durante la pandemia y que hay que saber primeramente para no contagiarse y, también, porque es parte del lenguaje que se maneja ahora. ¡No os vayáis a quedar atrás! Que esto parece que no para...
Al principio del estado de alarma se nos dijo por activa y por pasiva que lo que había que hacer en todo momento era lavarse bien las manos y a eso se unieron después nuevas normas: uso obligatorio de mascarillas y guardar los metros de seguridad. Esos primeros mandamientos permanecen en el tiempo porque son los más fundamentales para combatir a este virus y forman parte del tándem de la regla de las '3 M' (Mascarillas, Manos, Metros de seguridad).
Y todavía queda otro vía abreviada con la que seguir concienciando a la población. Raúl Ortiz de Lejarazu, virólogo, profesor de Microbiología y consejero científico del Centro Nacional lo ha estado haciendo durante el verano cuando se han relajado más las medidas y eso ha provocado que ahora estemos en la segunda ola. Este virólogo habló y alertó del peligro de las '4 B' que hacía referencia a Bodas, Bautizos, Bares y Botellones.
Una indicación a la que después le ha querido añadir otros dos nuevos peligros que casualmente también empiezan por 'B': Barbacoas y Banquetes, tal como ha sentenciado en su cuenta de Twitter. Una forma muy sencilla de explicar lo que se debe y también no se debe hacer para que absolutamente todo el mundo no tenga dudas y así no se descumplan las normas.