Desde que comenzó la pandemia de coronavirus, hace ya más de dos años, nuestras vidas han ido cambiando poco a poco y nos hemos tenido que acostumbrar a rutinas y hábitos que ni seríamos capaces de imaginar, como el hecho de tener que trabajar con mascarilla o ver conciertos sentados para asegurarnos de que no nos acercamos a mucha gente. Ahora vemos como normales, o al menos justificables, nromas como llevar mascarilla en un parque. Pero, ¿llegaremos a ver como algo normal la mascarilla de nariz?
Ha aparecido en Corea del Sur. En el país asiático están experimentando un aumento de los contagios, similar al que hemos vivido en Europa con la sexta ola debido a la variante ómicron, lo que ha llevado al Gobierno del país a tener que recuperar restricciones para frenar los contagios. Justo en este momento es cuando se ha puesto a la venta la mascarilla que solo cubre la nariz.
Se llama "kosk", una combinación de las palabras coreanas nariz y mascarilla, y han salido a la venta recientemente, fabricadas por la compañía Atman. Diez unidades se venden por unos seis euros aproximadamente. Cada una de estas mascarillas tiene dos piezas para que la uses de forma "normal", es decir, con nariz y boca cubiertas, pero, cuando vayas a comer o beber, doblarla y quedarte solamente con la nariz cubierta.
Vamos, como toda esa gente que vemos en España que llevan la mascarilla solo para la boca, con la nariz por fuera, pero al revés. Son muchos los que sospechan de la eficacia de este invento, razón por la cual se ha viralizado en las redes españolas.
Sin embargo, algunos medios de comunicación apuntan a que, según algunos estudios científicos, la nariz es el canal de acceso más fácil para que el coronavirus entre en un organismo. Por la boca sale, si estás contagiado, pero por la nariz entra. Entonces, puede que esta mascarilla de nariz tenga sentido. Porque si estás contagiado lo normal es que te quedes en tu casa y no vayas a un restaurante, pero si estás sano, proteger tu nariz reducirá el riesgo de que te contagies.
Catherine Bennett, catedrática en epidemiología en el Instituto de Salud de la Universidad Deakin, en Australia, ha explicado a Nine News que aunque esta nueva mascarilla le parece una "idea extraña", siempre es mejor esa pequeña protección que nada, aunque considera que usarla solo haría una "pequeña diferencia".