Courtney Ireland-Ainsworth, una mujer británica de 20 años de edad, ha sido condenada a prisión por crear cuentas falsas de Instagram para intentar acusar a su exnovio de stalker (o acosador cibernético).
La joven, residente en Cheshire, Inglaterra, creó al menos treinta cuentas falsas en la plataforma Instagram entre los meses de julio y diciembre de 2020, según indican los informes.
La metodología que usaba Ireland-Ainsworth era crear diferentes cuentas en las que fingía ser su exnovio y se enviaba mensajes violentos a ella misma. Con las pruebas en la mano, denunció a su expareja, con la que había mantenido una relación sentimental durante dos años.
La chica de 20 años llegó a acudir a la Policía hasta en diez ocasiones, una de ellas con un mensaje en el que se podía leer una amenaza de apuñalamiento. Eso provocó que su exnovio fuera detenido en seis ocasiones para investigar las acusaciones. Además de los hechos contra ella, también se inventó que el chico había acosado a las amistades de la joven y había tirado una piedra contra la ventana de su abuela.
Estas denuncias provocaron que su expareja fuera despedido de su trabajo y tuviera que llevar una pulsera electrónica en el tobillo para seguir sus pasos y estar localizado en todo momento, además de tener un arresto domiciliario de doce horas al día, según informó el Liverpool Echo.
En este mismo periódico, que pudo hablar con el exnovio, el joven reconoce que lo ocurrido le afectó gravemente a su salud mental, y que incluso llegó a tener pensamientos suicidas, además de que necesitó tratamiento psiquiátrico.
Finalmente, la investigación policial demostró la red de mentiras que la joven inglesa había formado para inculpar a su exnovio. Los detectives solicitaron datos a Meta, la empresa que está detrás de Instagram, y esta colaboró. Así se demostró que 17 cuentas habían sido creadas con cuentas de e-mail pertenecientes a Ireland-Ainsworth. Por este motivo, la chica de 20 años fue arrestada.
Todos los cargos contra Mr. Jolly, su exnovio, fueron retirados. El pasado lunes se conoció la sentencia de este caso, que condenaba a Courtney Ireland-Ainsworth a diez meses de prisión y a diez años de orden de alejamiento.