A esta nueva edición del Viña Rock 2023 le han llovido un sinnúmero de críticas por parte de los asistentes. El festival que tiene lugar todos los años en la localidad de Villarrobledo, ha aparecido en reiteradas ocasiones en los medios de comunicación debido a una serie de episodios desafortunados que han ocurrido desde el jueves 27 de abril hasta el domingo 30 y que han dado mucho de qué hablar en redes.
Hoy en día las redes sociales son grandes herramientas de denuncia para visibilizar alguna problemática que ha sufrido alguien, es por ello que los camareros del festival han acudido a ellas para denunciar las malas condiciones en las que tuvieron que vivir durante su estancia.
"Mi sobrina ha ido a currar de camarera al #VinaRock2023 y tuvo que ir a buscarla mi hermana porque sufrió una intoxicación. ¿Por qué? Estás son las condiciones en las que estuvieron trabajando, durmiendo y comiendo", es el texto que ha compartido un usuario de Twitter llamado, Joseba Pérez para hablar sobre el caso de su sobrina, y que acompañan las imágenes que ha recopilado de otros otros camareros que han tenido que pasar por lo mismo y lo han demostrado públicamente.
En las imágenes se puede ver que el lugar en donde debían dormir se trataba de el gimnasio de una escuela o de un club con colchones de espuma rotos y en muy mal estado. A la vez, el hombre muestra una conversación de una joven que cuenta que la mitad de la plantilla tuvo problemas gástricos durante el festival por la mala condición de la comida que les brindaron ya que según ella "les daban de comer sobras de no se donde", pese a que les decían que la comida la preparaba un catering.
A la vez, la misma persona habla de los pocos momentos de descanso que tenían en medio de la jornada laboral de 11 horas, desde las 4 de la tarde hasta las 3 de la mañana, sintiéndose mal, con mucho calor, y poco descanso. El tuit rápidamente se hizo viral y ha tenido más de un millón de visualizaciones y cientos de comentarios de los usuarios que han criticado a la organización.
Como si fuera poco, además de las denuncias, el viento ha tomado especial protagonismo en esta edición del festival. Pese a que la localidad albaceteña es conocida por ser ventosa, en esta ocasión un pequeño tornado ha acechado la zona de acampar y se ha llevado un par de tiendas por su camino y cientos de pertenencias. Las imágenes de las "tiendas voladoras" rápidamente se han difundido en las redes dejando a muchos boquiabiertos por el fuerte viento que ha acechado el lugar y ha causado destrozos.