Fue la revista ‘Lecturas’ la que sorprendió a todos con el anuncio de la ruptura de Aitana y el actor Miguel Bernardeau, después de cuatro años de relación amorosa. Hasta ahora, ninguno de los dos ha salido a confirmar o desmentir su separación, pero Aitana sí dijo delante de la prensa que estaba “viviendo sola” en la casa que compartía con su pareja.
Sabemos que Miguel no pasó su último cumpleaños con ella (estaba rodando en Canarias y lo celebró con su madre, Ana Duato) y nadie le vio en el último concierto de la gira ’11 Razones Tour’, al que si asistió, por cierto, Sebastián Yatra. Incluso, la cantante eligió varios temas de desamor y gesticuló ciertas risitas que hicieron pensar que podrían estar dedicadas a su ex.
Sin embargo, el último gesto de la artista en Instagram nos ha despistado por completo: ¡le ha dado like a la última foto que Miguel ha subido a Instagram! Y, hoy en día, dar un like a un exnovio no es ninguna tontería. Y no se trata de una foto de un paisaje, o de una reivindicación social o un tema profesional, no: es un primer plano de su cara, con un efecto en movimiento. ¿Qué significa? ¿Acaso no han roto de verdad? ¿O es una puerta a la reconciliación? Porque siendo él un actor tan conocido y ella una artista archifamosa, sabían que este like iba a dar mucho que hablar…
Todos los rumores apuntaban a que fue durante el rodaje de ‘La última’ donde empezó su crisis sentimental. Las rencillas surgidas entre ellos, trabajando codo con codo, podrían haber dinamitado su relación, pues el propio Miguel ya advirtió de que no quería rodar la serie junto a su padre para no “mezclar el trabajo con la vida personal”; ¿por qué no iba a pensar lo mismo de su novia?...
Sin embargo, lo que parecía ser una ruptura fulminante, con el abandono del actor de la casa ‘familiar’ incluido podría no haber sido así dado este gesto amistoso de la artista. Ella ya le dijo a los medios que no se iba a “pronunciar sobre el tema” porque nunca lo ha hecho y, esta vez, no iba a ser distinto, así que los fans tendrán que seguir quedándose con la intriga.