Alemania se suma a la lista de países que desean hacer frente a las las reglas en el Mundial de Qatar 2022. La selección, en los minutos previos de comenzar su partido contra Japón, se ha tapado la boca para la foto grupal en señal de protesta por no haber podido jugar con el brazalete de arcoíris con el lema 'One Love', que promueve la inclusión, y por la violación de los derechos humanos en el país.
A pocos minutos de que comience el juego, el equipo ya estaba con la mano sobre su boca "callandose". Horas antes, su capitán Manuel Neuer había comunicó que estaba dispuesto a pagar las sanciones con su propio bolsillo y, pese a que tuvo que desistir, no bajó los brazos y salió al césped luciendo un nuevo brazalete que rezaba la frase "no discrimination" (no a la discriminación), el mismo que llevó el capitán danés, Simon Kjaer.
Aunque no han podido hacerlo de manera explícita, el equipo ha logrado transmitir un mensaje claro a través de pequeños detalles. No solo su gesto en la fotografía, sino también los botines color arcoíris que el joven ha llevado durante todo el juego.
Alemania era uno de los equipos, junto con otras seis selecciones, involucrados en la iniciativa de proclamar por la igualdad de derechos en Qatar junto con Países Bajos, Dinamarca, Inglaterra y más, pero en vísperas de la inauguración del Mundial, el pasado domingo la FIFA envió un comunicado alertando sobre las consecuencias y sanciones que impondrá sobre los equipos que la lleven, entre ellos, una tarjeta amarilla. Fue allí cuando las diversas selecciones comunicaron por su cuenta que no llevarían el brazalete.
Afuera de la cancha el mensaje también fue claro. En las gradas, se ha podido ver que Nancy Faeser, la ministra de interior, ha aparecido sentada junto al presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en el partido luciendo un brazalete blanco con el lema 'One Love' en señal de apoyo a la lucha.
Cada equipo ha utilizado la oportunidad de ser el centro de las miradas, con el objetivo de enviar un poderoso mensaje a modo de protesta. Irán ha sido otro de los equipos que no se ha quedado atrás y también han protestado al no cantar el himno tras su primer encuentro futbolístico con Inglaterra, por el momento de tensión y caos social que está viviendo el país tras el asesinato de Mahsa Amini y que se ha llevado la vida de más de 200 personas.