El mundo del fútbol quedó sobresaltado este martes ante la triste noticia que comunicó Kirian Rodríguez, actual jugador de la Unión Deportiva Las Palmas. El futbolista, de 26 años, tiene un linfoma de Hodgkin, un cáncer que comienza en las células llamadas linfocitos y que entre otras muchas personas, por ejemplo, tuvo el actor y humorista Dani Rovira.
"Se ha especulado mucho estas últimas semanas sobre mi estado de salud. Muchos han querido adelantar la noticia antes de respetar mi privacidad. En las pruebas físicas de la pretemporada le comuniqué al club que no me encontraba bien físicamente, me encontraba con dolores e inflamación. En las pruebas que me practican tengo el bazo inflamado y deciden ingresarme para realizar más pruebas y es cuando doy positivo en COVID. El lunes me consiguen extraer un ganglio para analizar y se confirma que tengo un linfoma de Hodgkin", ha contado el jugador en rueda de prensa.
Un duro revés, sin ningún tipo de dudas, que el futbolista está decidido a afrontar con fuerza y energía: "Estaré apartado un tiempo del terreno de juego, empiezo una nueva lucha pero voy a estar a muerte con el equipo".
Pero, ¿qué es exactamente un linfoma de Hodgkin? Según la Asociación Española contra el Cáncer, es uno de los tipos de cáncer con mejor pronóstico de supervivencia, dado que la tasa de curación de esta enfermedad se sitúa por encima del 70%. En Europa, se diagnostican alrededor de tres casos por cada 100.000 habitantes cada año y es más común en hombres que en mujeres, según los datos valorados por la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM).
Los linfomas son un grupo de cánceres que afectan al sistema linfático, aquel encargado de combatir las infecciones y enfermedades. Esta enfermedad lo que hace es afectar a los ganglios linfáticos del cuello o del mediastino, una zona que se encuentra entre los pulmones y la zona posterior del esternón. También pueden aparecer en los grupos de ganglios linfáticos que están en las axilas, en la ingle, en el abdomen o en la pelvis.
Sus primeros síntomas son muy diversos, pero lo más común es hinchazón indolora de los ganglios linfáticos en el cuello, una fatiga persistente, posibilidad de presentar fiebre, pérdida de peso de forma no intencionada y sudoraciones nocturnas son algunos de los síntomas más evidentes de la enfermedad.
El tratamiento para el linfoma de Hodgkin dependerá de cada caso y del estadio en el que se encuentre la enfermedad en el momento del diagnóstico. Además de la quimioterapia, se pueden utilizar trasplantes de células madre.