Malala Yousafzai es una de las activistas más conocidas a nivel mundial desde que en 2012 su historia diera la vuelta al mundo: los talibanes intentaron acabar con su vida a tiros en su Pakistán natal cuando tenía 15 años por defender la educación femenina. Tras su recuperación, se mudó a Birmingham (Reino Unido) junto a su familia, donde continuó desarrollando su faceta como activista y puso en marcha con su padre el 'Fondo Malala', una organización sin ánimo de lucro en defensa de la educación de las niñas.
Su lucha en favor del derecho de las mujeres a acceder a la educación le valió el Premio Nobel de la Paz en 2014, cuando tenía 17 años, convirtiéndose así en la persona más joven en recibirlo. Ahora, siete años después y meses después de haber cumplido los 24 años, sigue asentada en Birmingham junto a sus padres y acaba de comunicar a través de sus redes sociales que ha contraído matrimonio con Asser Malik en una ceremonia íntima que ha tenido lugar en la casa familiar.
"Hoy es un día precioso en mi vida. Asser y yo nos casamos para ser socios de por vida. Celebramos una pequeña ceremonia de nikkah con nuestras familias. Envíenos sus oraciones. Estamos emocionados de caminar juntos en el viaje que tenemos por delante", escribió la activista tanto en Twitter como en Instagram, adjuntado algunas fotos del enlace en la que posa junto a su marido y sus padres, Ziauddin Yousafzai y Toor Pekai Yousafzai.
Malala, que lució un traje rosa con motivos dorados, ha explicado que la boda ha sido muy íntima, ya que ha tenido lugar en el jardín de su hogar con los padres de ambos como invitados y también ha contado que se ha celebrado por el rito musulmán, religión que tanto ella como el novio profesan. La pareja ha recibido cientos de felicitaciones a través de Twitter e Instagram: le han enviado sus buenos deseos, por ejemplo, el presidente de Canadá, Justin Trudeau, o el CEO de Apple, Tim Cook.
Pero también ha habido mucha gente que se ha quedado muy sorprendida con la noticia, ya que hace tan solo cinco meses, en julio de 2021, Malala cumplía 24 años y concedía una entrevista a la edición británica de 'Vogue' en la que explicaba que había estado planteándose qué quería hacer en el futuro tras graduarse en Filosofía, Política y Economía por la Universidad de Oxford y en la que confesaba que nunca había entendido por qué la gente decidía casarse.
"Todavía no entiendo por qué la gente tiene que casarse. Si quieres tener una persona en tu vida, ¿por qué tienes que firmar papeles de matrimonio, por qué no puede ser simplemente una sociedad?", comentaba Malala en 'Vogue', aunque también añadía que su madre deseaba que se casara, que a su padre le llegaban propuestas de hombres pakistaníes que querían contraer matrimonio con ella y que ella misma había estado reflexionando últimamente sobre las relaciones románticas: explicó que dudaba de cómo uno puede estar seguro de que esa es la persona con la que quiere compartir su vida y confiar en ella para siempre.
En esa misma entrevista, en la que explicó que el matrimonio de sus padres había sido concertado, Malala también dejó la puerta abierta a una posible unión matrimonial en el futuro, ya que comentó que se puede cambiar de opinión con el paso del tiempo y que uno no siempre tiene las mismas creencias: "Incluso hasta mi segundo año de universidad pensé: 'Nunca me voy a casar, nunca voy a tener hijos, solo voy a hacer mi trabajo. Voy a ser feliz y vivir con mi familia para siempre'. No me di cuenta de que no eres la misma persona todo el tiempo. Tú también cambias y estás creciendo".
Tras la sorpresa inicial, muchos se han preguntado entonces quién es el hombre con el que se ha casado Malala. Se trata de Asser Malik, un joven de origen pakistaní como ella que se graduó en la universidad Lahore de aquel país en Economía y Ciencias Políticas en 2012, el mismo año en el que su actual mujer sufría el atentado que casi acaba con su vida.
Asser, que es unos años mayor que Malala y se define como "emprendedor", ha trabajado en varias compañías en su Pakistán natal tal y como figura en su perfil de LinkedIn, donde explica que ha pasado por empresas de alimentación como Coca-Cola o Engro Foods, aunque en los últimos años se ha centrado en el deporte y su actividad laboral ha estado vinculada a este sector.
Desde mayo del año pasado, es el director de operaciones de la Pakistan Cricket Board (PCB), la organización que se encarga de todos los asuntos relacionados con el cricket de Pakistán. En su cuenta de Instagram, Asser muestra que es un gran fan de todos los deportes y, en especial, del cricket, pasión que comparte con su esposa, que en su perfil de Instagram se define como: "Defensora de la educación de las niñas, cofundadora de la 'Fundación Malala', aficionada al cricket".