Becky G saltó a la fama en su Estados Unidos natal gracias a YouTube en 2011, cuando tenía 14 años. La joven Rebecca Marie Gómez subía covers de canciones muy conocidas a esta plataforma y allí fue donde la descubrió el conocido productor Dr. Luke, que ya había trabajado con estrellas del pop como Britney Spears o Miley Cyrus. Por aquel entonces, Becky era solo una adolescente que soñaba con triunfar en el mundo de la música y que solía subir vídeos a YouTube usando gafas, normalmente negras y de pasta, sin maquillaje y con su característica melena negra azabache.
Ahora, diez años después, la cantante es toda una estrella en Estados Unidos y también en América Latina y España, lugares en los que ha triunfado desde que el 14 de julio de 2017 sacase su cuarto sencillo en español (idioma que aprendió gracias a sus abuelos mexicanos emigrados a Estados Unidos), 'Mayores', junto a Bad Bunny, un sencillo con el que arrasó en las listas de éxito y que recientemente ha alcanzado los 2.000 millones de reproducciones en YouTube (Becky le contó a Divinity que la canción nació "como una broma"). Un año después, sacó 'Sin Pijama' y se consolidó como una de las artistas latinas más importantes del panorama musical.
Pero Becky no solo cambió de idioma para cantar, todo un acierto si tenemos en cuenta la trayectoria en ascenso que experimentó su carrera, sino que también modificó su look: en el videoclip de 'Shower' (su primer gran hit) en 2014, lucía bandanas para sujetar el pelo, colores vivos y aros grandes, mientras que en el de 'El Alfa', lanzado este verano, lleva muchas joyas, zapatillas de deporte y conjuntos formados por pantalones de chándal y tops de colores vivos.
Además, dejó de llevar gafas en público, pasó a utilizar lentillas de color verde en algunas ocasiones como eventos o galas de premios y probablemente usó alineadores para juntar sus dientes, que estaban más separados cuando comenzó su carrera hace ya diez años.
Ahora, la cantante luce una imagen un tanto distinta, aunque conserva su característica melena negra azabache, que suele peinar igual que hacía en el pasado: con grandes ondas para subirse al escenario y normalmente suelta, aunque últimamente también ha hecho algunas apariciones luciendo trenzas o coletas XXL. En 2017, se cortó el pelo por los hombros, coincidiendo con el lanzamiento de mayores y esa es la ocasión en la que la hemos visto con la melena más corta y en 2018 se pasó al rubio durante un tiempo.
Antes, solía pintar sus labios con labiales rojo mate y ahora prefiere los bálsamos brillantes, como los que promociona en sus redes, ya que ha lanzado una línea de maquillaje llamada Tresluce Beauty. Para promocionarla, la cantante de 'Mala santa' compartió un vídeo en Instagram de cuando tenía 15 años y era ella misma la que se arreglaba antes de cada concierto. Sus fans se quedaron muy asombrados con el cambio que había experimentado la cantante y es que en ese imagen aparece hasta con flequillo recto.
En las redes sociales se rumorea que Becky no solo habría usado alienadores para juntar sus dientes, sino que también se habría inyectado botox o ácido hialurónico para hacer sus labios más grandes o que se habría retocado la nariz. La cantante, que suele subir muchas fotos a Instagram con distintos looks (y muchas acompañada por su novio Sebastián Lleget), nunca ha hablado públicamente acerca de estos supuestos retoques.
La cantante, además, es una gran apasionada de la moda y, a finales de septiembre, ha estado en la Semana de la Moda de Milán, donde ha lucido prendas de la nueva colección de Versace. "¡Muchas gracias Donatella Versace por tenerme en tu show! Me lo pasé genial y estoy muy agradecida", dijo Becky en Instagram.