Cuántos dolores de cabeza nos traen los meses previos a ingresar en la universidad. Aún más, si cabe, estos días de cuarentena, en los que todavía no sabemos cómo va a ser la prueba de acceso ni si para septiembre, cuando comiencen las clases, podrá incorporarse todo el mundo con normalidad. Los estudiantes de segundo de bachillerato están desquiciados, intentando aprender todo el temario de su curso mientras tratan de decidir qué y dónde estudiar.
Si vives en un pueblo o una ciudad pequeña y quieres estudiar en la universidad, seguramente tendrás que mudarte. Uno de los pasos más emocionantes, después de haber pasado toda la vida con tus padres, es elegir la ciudad y la facultad en la que vas a invertir al menos cuatro años de tu vida. Mirarás mil datos e infografías, leerás cuarenta artículos sobre “las mejores universidades de España” y recorrerás los foros de todos los blogs en busca de ese comentario de un antiguo estudiante que te convenza de pedir plaza en una universidad u otra. Ahora bien, ¿te has parado a mirar cuánto cuesta cada centro?
Las diferencias del coste de matriculación para una misma titulación son abismales entre las universidades públicas de toda España, dependiendo de dónde estén ubicadas, y eso sin hablar de las privadas. ¿Tienes claro cuánto puede costarte estudiar en los distintos centros? En Yasss te ayudamos a salir de dudas, para que sea más fácil escoger.
España está entre los seis países de la Unión Europea en los que más caro es estudiar en la universidad pública. ¿Y cómo se calcula el precio de la matrícula? Pues por los créditos, que son la unidad de medida universitaria por excelencia. Familiarízate con ellos antes de entrar en tu facultad, porque te traerán de cabeza. Cada asignatura cuatrimestral suele tener 6 créditos ECTS, y cada año suma 60 créditos. Un grado normal tiene 240 créditos, y cada ECTS tiene un precio definido por comunidad autónoma, al que le tienes que añadir las tasas de la universidad.
Pero no cuesta lo mismo estudiar una ingeniería que medicina, ADE o periodismo, ni estudiar en Madrid, Cataluña o Andalucía, donde puedes llegar a matricularte gratuitamente si cumples una serie de condiciones. Entre comunidades autónomas nos encontramos una brecha de 21.6 euros por crédito de primera matrícula: en 2018, estudiar en Catalunya costaba una media de 33.52 euros por crédito, siendo la comunidad más cara, por delante de Madrid (24.6 euros por ECTS) y Castilla y León (23.3 euros).
Por el contrario, las comunidades más baratas para estudiar en la universidad son Galicia (11.89 euros), Andalucía (12.6 euros), Cantabria (13 euros) y Canarias (14 euros). Una diferencia de precio que dificulta la igualdad de oportunidades entre estudiantes.
También existen las universidades privadas, que es lo que pasa en el set de rodaje de Elite cuando dejan de grabar. Las Encinas, de hecho, toma las instalaciones del campus de Villaviciosa de Odón de la Universidad Europea de Madrid, una de las más de 25 que hay en España.
La gran mayoría de las privadas son presenciales, y becas aparte, el coste anual de la matrícula suele estar entorno a los 10.000 euros el año, a los que hay que sumar las tasas de cada universidad. Por ejemplo, si nos fijamos en el precio del primer año de medicina en el curso 2017/2018, llega a duplicarse dependiendo de la Universidad, tal y como explican en el portal especializado yaq.es.
En la CEU Cardenal Herrero de Valencia, costaba 21.000 euros; en la Universidad Europea, 20.440 euros; en la Alfonso X el Sabio, 20.254 euros, y en el CEU San Pablo, 20.240 euros. Si nos fijamos en la Católica San Antonio de Murcia, el primer año cuesta 11.395 euros, y en la Católica de Valencia San Vicente Mártir, 12.490 euros. El precio medio del curso de medicina en las universidades privadas, según cuentan desde dicho portal, es de 16.894 euros.
¿Cómo pedir plaza en una privada? Cada una tiene sus propias normas, pero en líneas generales, debes superar la selectividad y una serie de pruebas, que incluyen una entrevista personal, un test de conocimientos o psicotécnico y una prueba de idiomas, normalmente de inglés. Las pruebas suelen variar dependiendo de la titulación a la que quieras acceder.
En cuanto a precio, entre la pública y la privada están los centros adscritos, espacios que se relacionan con una universidad, ya sea pública o privada, y cuyas titulaciones son calcos de la universidad a la que están asociadas. La clave de los adscritos es que suelen estar especializadas en los grados que ofrecen, por lo que suelen prestar especial atención a la investigación y la bolsa de empleo y prácticas.
Para acceder a estos centros, tienes que seguir el mismo proceso que para entrar en una pública: rellenas la preinscripción y, una vez te dan la plaza, formalizas la matrícula. Algunos centros piden, además de la nota de selectividad, una prueba de admisión.