En la fama puedes empezar con el pie torcido y retorcido varias veces por el público, que vota a otrxs antes que a ti o te lanza huevos para que gotees tu humillación en el escenario. Si no, que se lo digan a todxs esos artistas que se quedan atrapados en las primeras fases de selección, los que nunca llegan, o esos (infinitos) que un jurado miope guillontina en las fases primerizas de un talent show de renombre internacional.
Resulta sorprendente comprobar cuántos famosos y estrellas de la música han balbuceado o desafinado frente a uno de esos triunviratos de jueces que, a modo de los césares romanos con el día tonto, bajan el pulgar sin misericordia y te humillan criticando tu técnica vocal.
Hoy, su talento está fuera de toda duda. Mueven masas e influyen en la opinión pública con el más mínimo gesto. Paradójicamente, los jueces de estos concursos de talentos, que carga el diablo o la miopía, jamás llegaron a sospechar que estaban mandando al banquillo a algunas de las figuras imprescindibles de la música.
Te hablamos de algunas estrellas que han caído expulsadas en talent shows.
El nombre de Rosalía es casi palabra de Dios(a) en casi todos los ámbitos que toca. No importa si es un nuevo peinado, una rutina de maquillaje o el anuncio de un nuevo tema, que siempre promete poner patas arriba la industria y cambiar molecularmente algún género lleno de popes e integristas (ya lo hizo con el flamenco, hasta que saltó a la casilla del reguetón).
Te sorprenderá saber que corre por las redes sociales un video de 2008 recuperado por Telecinco. En él, con el tema ‘Como un mar eterno’, se puede ver a la catalana desafinando frente al jurado de ‘Tú sí que vales’, que no tuvo piedad con ella y le rozó el cuerpo con sapos, culebras y un desdén frío que ella se ha cobrado con creces gracias al tiempo. El jurado le dijo que tenía potencial, pero que había elegido mal la canción y no sabía sacarlo. ¿Sufrían presbicia y miopía? La catalana sabía y sabe dónde pone el ojo y la voz, y en aquel momento dio una respuesta de lo más elegante: “"No pasa nada. He venido aquí a aceptar las críticas y a aprender de profesionales como vosotros".
No ha habido un solo jurado que no le haya expresado a Amaia su admiración sincera por su trabajo, su voz y su manera de cantar (no tan dulce y tierna como muchos afirman, para infantilizarla). Quizá el caso más paradigmático sea el de 'Cántame una canción'. La rechazaron, sí, no sin decirle antes cuánto les había gustado su cover en el escenario.
Corrían los 90, y antes de ser diva, divina y Diosa, Beyoncé era una cría que lideraba el grupo de hip hop Girls Tyme en un extinto talent show llamado ‘Star Search Girls Time”. Tampoco tuvieron mucha misericordia con ella.
Un adorable chiquillo con un flow y unos movimientos de baile tremendamente sugestivos se come el escenario mientras canta Respect, de Aretha Franklin. Es el mini Justin Bieber de 12 años compitiendo en un concurso de canto en su Strafford (Canadá), pocos años antes de saltar a la fama gracias a sus primeros covers en la plataforma Youtube. Otro que no ganó nada y seguramente siga soñando con frías venganzas para los miembros del jurado, cabezas de caballo incluidas.
Queda manifiestamente claro que Justin Timberlake podría haber elegido el country como género principal. Las boy bands le hicieron ganar mucho más dinero cuando tocó la fama, pero nos hubiera gustado verlo montando un potro salvaje y rasgueando la guitarra en muchos más talent shows con su nombre de entonces, Justin Randall.
Es difícil ser jurado. Es muy difícil. Es probable que aún tengas pesadillas por no haber sabido descubrir en esa chiquilla que sale al escenario a una de las figuras que revolucionarían el pop de los 2000, y azote de sí misma gracias a una industria que te devoró y se aprovechó de su talento para convertirte en un juguete roto. Britney no debía tener más de seis años cuando participó en el mismo talent show que Beyonce, 'Star Girls Search'. Claro, no ganó. ¿Habría cambiado su historia si lo hubiera hecho?