Quizás no te hayas dado cuenta, porque estos días de confinamiento se parecen todos entre ellos, pero está a punto de llegar el Día de la Madre. Si cada vez que esta fecha se acerca nos entra el agobio (cómo sorprenderla, qué regarle), imaginaos ahora que no tenemos libertad de movimiento para comprar nada y que los macarrones han aumentado lo suficiente su valor como para que sea imposible hacer un collar de pasta. Ni siquiera por la broma.
El caso es que el Día de la Madre, que en España se celebra el primer domingo de mayo, es una fecha muy significativa que este año nos cae, como tantas otras cosas, confinados; en Yasss hemos pensado con qué puedes sorprender a tu madre en estos días monótonos. Allá van algunas ideas de regalo.
En cada país se celebra un día distinto. Se cree que esta fecha comenzó a celebrarse en honor a la diosa egipcia Isis, la ‘Gran diosa madre’, a quien homenajeaban en toda la civilización antigua. También en Grecia honraban a Rea, madre de los dioses del Olimpo, y a su equivalente en Roma, Cibeles, a quien celebraban llevando ofrendas florales durante varios días.
En España existen registros del siglo XIV, en los que ya se muestra que algunas cofradías de Girona rendían culto a la virgen de la Inmaculada. Una fiesta que se ha celebrado en España desde finales del XVII, coincidiendo con la fiesta de esta virgen, el 8 de diciembre. Es en 1965 cuando el día de la madre se traslada al primer domingo de mayo, fecha en la que lo celebramos aún hoy.
Lo importante ese día es tener un detalle bonito. Si estás pasando el confinamiento con tu familia, será más sencillo, pero si no estáis pasando la cuarentena en la misma casa, solo queda hacer una llamada a tu madre (y a aquellas personas con las que quieras celebrarlo) o una videollamada, si puedes. Si estáis en la misma casa, puedes empezar el día haciendo un desayuno a la altura del domingo, con sus cosas favoritas (eso si tienes suerte y consigues levadura, claro): seguro que le hace muchísima ilusión. Aprovecha y prepara un día con ella, con juegos de mesa o viendo su película favorita.
Si tienes tiempo (y aún quedan días, hasta el 3 de mayo), puedes preparar un álbum de scrapbooking. Esa técnica que consiste en alternar fotos con recortes de cosas pequeñas y personales. Si le echas un ratillo y buscas cosas que tengas por casa (tijeras, botones, flores secas… ¡todo vale!), seguro que el resultado es muy bonito y emotivo.
También puedes regalarle una novela. Si tiene ebook, ¡aleluya! Tu tarea es mucho más sencilla. Pero si es de las que prefiere leer con el tomo en la mano, contacta con alguna librería que haga envíos a domicilio (los libreros atienden online: puedes decirles el último libro que ha leído ella y te recomendarán otra obra que pueda gustarle) o comprar un cheque regalo de CEGAL que podrá canjear después, cuando se levante el estado de alarma. Además, así colaborarás con estos comercios tan precarios.
Puedes aprovechar estos días de bulos, desinformación y aburrimiento (todo hay que decirlo) para comprarle una suscripción a su medio favorito. Ya sea una revista, periódico digital… o una editorial o plataforma audiovisual. No necesitan envíos y podrá hacer uso de ellas desde el primer momento.
Si eres de los que prefieres tener un detalle más tangible, opta por un ramo de flores. Muchas empresas, como Colvin, preparan las flores, les ponen la dedicatoria que tú elijas y envían a donde pidas, en la fecha y hora que prefieras, el ramo. Es una forma bonita de acercarte a la persona con la que quisieras celebrar este día, especialmente si está lejos.
Y, si no, ¿qué te parece un regalo con vistas al final del aislamiento? Puedes optar por uno de esos cofres de experiencias para disfrutar juntas, cuando acabe la cuarentena, o comprometerte con un día de spa, un picnic en la montaña, unas entradas para el teatro cuando vuelvan a abrir… es un detalle esperanzador. Puedes escribirlo en una tarjeta (¡hazla a mano, con cosas que tengas por casa!) y ponerle un mensaje bonito.