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Palabra de experto: guía de supervivencia para arreglarse el pelo en casa durante la cuarentena sin estropicios

  • Podemos pensar que meternos la tijera en casa no es tan difícil, hasta que te pones a hacerlo...

  • Jugar a los peluqueros en casa en tiempos del confinamiento puede darnos algún que otro disgusto, ¡haz caso a estos consejos!

Durante el confinamiento por la crisis del COVID-19 nuestro cabello ha crecido y lo ha hecho a su aire, indomable. Poco o nada queda de los cortes de pelo que hicieron manos expertas. Tampoco los tintes ni las mechas son lo que eran. De cuarentena por la crisis del coronavirus y con las peluquerías cerradas, al mirarnos al espejo nos planteamos qué hacer con nuestros rebeldes cabellos.

Aunque algunos se atreven, lo cierto es que ejercer de improvisado peluquero puede resultar algo arriesgado. Lo mejor, dicen los expertos, es optar por hacernos unos arreglos capilares de andar por casa, muy básicos como ha hecho Rosalía, mientras esperamos a que las peluquerías abran sus puertas y podamos acudir a ellas. Hemos hablado con tres expertos que nos han explicado cómo arreglarnos el pelo en casa durante el confinamiento sin hacernos un estropicio.

Qué material utilizar

Si no somos peluqueros ni vivimos con uno, seguramente no tendremos en casa las herramientas que utilizan los profesionales para arreglar el cabello. Sin embargo, a falta de material profesional, hay objetos en nuestros hogares que podemos utilizar para ponernos guapos durante la cuarentena.

"Todos tenemos en casa varios tipos de tijeras: de papel, de costura, de cocina… Pues bien, las mejores para realizar algún tipo de arreglo capilar suelen ser las de costura, o unas de papel largas, ya que la celulosa húmeda reacciona a los cortes del mismo modo que el cabello", explica Alfredo Valero, director creativo del salón Blades Hair Studio de Madrid. "Las usaría para pequeños retoques de flequillo, patilla... En ningún caso para cortes completos", aclara el experto, que recomienda retocarnos el pelo poco a poco y no hacernos un gran cambio de look hasta poder contar con la ayuda de un profesional.

El arreglo capilar no solo consiste en cortar el pelo. Se le puede dar forma creando efectos resultones y para ello también se puede recurrir a objetos que se tengan en casa. "Podemos utilizar rulos de papel de aluminio o palillos chinos para dar forma a nuestro pelo. Si utilizamos esos objetos cotidianos, enrollamos el pelo y le añadimos calor, obtendremos rizos, bucles u ondas, dependiendo del grosor del molde y la cantidad de pelo utilizado en cada sección", dice el peluquero Alfredo Valero.

Mejor con la ayuda de alguien

Aunque no se tenga al peluquero en casa, cualquier ayuda es buena a la hora de retocarse el pelo. "Lo mejor es tener la ayuda de otra persona o tres espejos, para cubrir todos los flancos de la cabeza y evitar moverla o girarla, ya que perderemos perspectiva general del trabajo", dice el peluquero Alfredo Valero, que recomienda cortarse solo lo justo: "Yo recomiendo como mucho pequeños retoques de flequillo y patillas".

Cuidado con los tintes

En el caso de personas con cabellos con trabajos técnicos complejos como mechas, degradados, decoloraciones o balayage, los expertos recomiendan no experimentar con los tintes en casa y esperar a poder acudir a la peluquería. "Arreglar un tinte mal hecho en casa puede suponer un disgusto para la cartera, ya que puede pasar de los 200 euros", cuenta Antonio Gómez, peluquero y formador de Redken. Si lo que se quiere es simplemente cubrir canas en las raíces, no es necesario recurrir a un tinte, tal y como explica el peluquero Alfredo Valero. En lugar de teñirse uno mismo/a en casa, aconseja como alternativa en este caso utilizar un spray para retocar raíces.

Hay una serie de cosas que se deben tener en cuenta antes de aplicarse un tinte por cuenta propia en casa. La peluquera Amparo Gómez, directora del salón Enjoy, en Madrid, recomienda "comprar un tono más claro del que suela aplicarse en la peluquería, ya que así será mucho más fácil arreglarlo en caso de que el resultado no guste". Por otro lado, el peluquero Alfredo Valero recuerda la importancia de hacerse un test previo para evitar reacciones alérgicas: "Si nunca nos hemos realizado color con anterioridad, o la última vez fue hace algo más de 6 meses, debemos realizar una prueba previa de alergia".

Para que no queden restos de tinte en la piel al teñirse, la peluquera Amparo Gómez da un importante consejo: "Aplicaremos un poco de vaselina en el contorno de la cara, de este modo cuando acabemos, podremos retirar el color de la piel con más facilidad". La experta indica que se deben usar guantes para aplicar el tinte y recomienda “colocarse una toalla encima de los hombros” para no mancharse.

Alfredo Valero, director creativo del salón Blades Hair Studio indica la forma en la que se debe aplicar el tinte: "Dividimos el cabello en cuatro partes, dos en la zona delantera y dos atrás. Iniciamos aplicando el color a las zonas delanteras, y aplicando solo sobre la raíz para no saturar de color el cabello. Después, continuamos con las partes posteriores del mismo modo".

Es muy importante respetar el tiempo de exposición del tinte. "Suele ser de entre 35 y 45 minutos, pero dependerá de la marca y vendrá indicado en las instrucciones del producto que se haya comprado", dice la peluquera Amparo Gómez. Por último se debe "enjuagar con agua abundante y dar dos manos de champú para dejar el cabello y cuero cabelludo completamente limpio y libre de restos de tinte", explica el peluquero Alfredo Valero, quien señala que hay que "acondicionar y aplicar una mascarilla nutritiva 10 minutos a temperatura ambiente".

Raparse o no, esa es la cuestión

Raparse es una opción que puede resultar tentadora cuando uno no sabe qué hacer con su cabello. Pero es importante tener en cuenta que no a todo el mundo le queda bien el look de pelo rapado. "El cabello nos ayuda a enfatizar unos rasgos o disimular otros. Si nos limitamos a rapar la cabeza, esos rasgos aparecerán, para bien o para mal. Si decidimos raparnos, es recomendable al menos dejar el doble de longitud en la parte de arriba respecto a los laterales, y tratemos de degradar con una longitud aún más corta la zona de nuca", explica Alfredo Valero, director creativo de Blades Hair Studio.

A la hora de raparse, "es fundamental que el cabello esté seco, dado que los peines de la máquina se deslizarán mejor", dice Amparo Gómez, peluquera y directora del salón Enjoy. La experta recomienda usar una máquina de cortar con diferentes peines para poder crear el efecto de disminución o degradado. "Hay que ir cambiando el peine, dejando el del número más pequeño para la zona en la que queremos que el pelo vaya más corto, que serán patillas y nuca", explica la peluquera.

Las puntas de las melenas y flequillos

El peluquero Antonio Gómez sugiere aprovechar la cuarentena para hacerse tratamientos capilares con los que cuidar y sanear el cabello, en lugar de cortarlo. Aunque los expertos consultados por Yasss recomiendan no cortar las puntas de la melena sin ser peluqueros, nos dan unas indicaciones para quienes quieran realizarse unos retoques básicos.

"Podéis realizar un pequeño corte con una coleta. El truco es simple, coged una coleta en la parte central de la frente. El cabello ha de estar pulido y tenso para conseguir un corte mas limpio. Tomamos las tijeras y, con la punta de las mismas, picoteamos el pelo para quitar las puntas abiertas. No cortéis demasiado, máximo dos dedos", explica el peluquero Alfredo Valero. "En cuanto al drama del flequillo, podemos usar la misma técnica que con las puntas de la melena, pero esta vez con el pelo de la coleta apuntando hacia la nariz, bien plano sobre la frente", añade.

La peluquera Amparo Gómez recuerda que para recortar el cabello "es fundamental que esté recién lavado y mojado". También hace hincapié en cortar menos de lo deseado para evitar pasarse: "Si lo que quiero es arreglarme las puntas, aunque necesite sanear tres dedos, cortamos solo uno. Así será mucho más fácil arreglarlo si no nos gusta. Si quiero cortarme el flequillo recto, marco un triángulo del centro de la frente al final de las cejas. Luego corto dos dedos menos del largo que quiero".

Por otro lado, Antonio Gómez, peluquero y formador de Redken, propone estas alternativas para evitar cortar el flequillo: "Se lo pueden dejar un poco más largo y llevarlo con una rayita en medio o rayita al lado. Se llevan muchísimo las horquillas, tanto de fantasía como básicas. Queda muy bien raya al lado y cabello aplastado con unas horquillas".

El arreglo del pelo en los chicos

En el caso de los chicos cortarse el pelo en casa resulta más complicado. "Al llevar la mayoría el pelo corto, cualquier pequeño error puede convertirse en un trasquilón. No recomiendo a los chicos cortarse el cabello en casa", dice Antonio Gómez, peluquero y formador de Redken. Sin embargo, sí se puede realizar algún pequeño retoque con mucho cuidado para arreglar un poco el look. "Si eres de los que ya no aguanta el pelo que monta sobre tus orejas, corta tan solo esas zonas. Recomiendo cortar con tijeras, alrededor de la oreja, tan solo el pelo que monta", dice Alfredo Valero, director creativo de Blades Hair Studio.

Los chicos que llevan un look de pelo más largo es mejor que jueguen con el efecto despeinado en lugar de recurrir a recortarse ellos mismos el cabello. Así lo explica el peluquero Alfredo Valero: "Hoy por hoy, la mayoría de chicos jugamos con nuestro pelo y nos gusta tener cierta longitud. En este caso lo mejor es tratar de esperar a poder ir a la peluquería. De todos modos, estamos en cuarentena y podemos permitirnos ir más despeinados".

Mejor no jugar a ser peluqueros

Los expertos consultados por Yasss aconsejan que no nos cortemos el pelo en casa ni experimentemos con los tintes si no somos peluqueros. Hay que tener en cuenta que su trabajo requiere una formación y la labor que desempeñan no la puede realizar cualquiera. Lo mejor es no jugar a ser peluqueros si no queremos correr el riesgo de estropear nuestro look. Los expuestos en este artículo son solo unos consejos básicos con los que arreglarse un poco el pelo, para estar más guapos/as, mientras esperamos a que las peluquerías vuelvan a estar en funcionamiento y se pueda acudir a ellas.