Todo el mundo tiene un pasado y el caso de estos streamers no es diferente. Antes de convertirse en estrellas de lo suyo, pasó un tiempo en el que su ahora profesión en realidad era su hobby.
Durante esos años en los que ser streamer no era una realidad o ese tiempo en el que no te ayudaba a pagar facturas, ellos tuvieron que buscarse la vida y trabajar de otras cosas. Algunas de ellas más habituales que otras, pero todas interesantes.
Es uno de los streamers más polémicos, pero también uno de los más seguidos y antes de ser El Xokas, Joaquín Domínguez también tenía que ganarse la vida. De hecho, no lo hacía nada mal y durante mucho tiempo compaginó ambos empleos, su papel como streamer con el de editor de vídeo en el canal del Real Madrid.
Según recogió en su día ‘La Razón’, no solo trabajaba en ello, sino que además estaba muy bien considerado y, cuando decidió dejarlo todo para ganarse la vida en Twitch, lamentaron mucho tener que dejarle marchar. No es la única vez que ha hablado de su pasado, también en La Resistencia reveló que sus abuelos “Tenían huertos y animales. Eran autosuficientes y comerciaban con ello”, lo que le habría enseñado la importancia del esfuerzo.
No es el único que vio en esta nueva plataforma la oportunidad de ganar dinero y disfrutar a la vez, convertir su pasión en su profesión. Auron fue otro de los que supo hacerse un hueco en este mundillo y conseguir por el camino un gran número de seguidores incondicionales.
Siempre ha estado trabajando, cuando no ha sido como streamer ha sido en una empresa de artes gráficas, donde estuvo desde los 16 años hasta que pudo dejarlo para dedicarse por completo a las redes. Comenzó con un canal de YouTube y después supo ver los cambios de la industria y los aprovechó a su favor.
El caso contrario es el de Ibai, quien desde el principio ha estado ligado a las redes. Comenzó en ellas como un hobby, comentando desde 2014 partidas de League of Legends (LoL). Su talento no pasó desapercibido, tampoco su carisma y con el tiempo comenzó a tener más visibilidad y ser más solicitado hasta que en 2016 lo dejó todo para dedicarse en exclusiva a la narración de eventos relacionados con los videojuegos.
Ibai es consciente de que su caso es la excepción y no la regla, por eso siempre está dispuesto a aconsejar a sus seguidores que persigan sus sueños, pero que lo hagan con los pies en la tierra. Destaca la importancia de una buena formación, de no abandonar los estudios por algo efímero. Mientras tanto, sigue sumando éxitos, dando las campanadas, organizando la King’s League (y también la Queens League) o La Velada del año, su exitosa competición de boxeo que ya suma tres ediciones.