Se acerca esa época del año, toca hacer la declaración de la Renta. Para muchos, es ya algo habitual, una práctica que se repite año tras año, pero para otras muchas personas, es la primera vez que se enfrentan a esta cita con la Agencia Tributaria. Así, quienes afrontan este reto por vez primera suelen tener muchas dudas, y algunos miedos, que vamos a intentar solucionar.
Lo primero es saber si necesitamos hacer la declaración de la renta o no es necesario. Todos los trabajadores, por cuenta propia o ajena, pensionistas o contribuyentes que han tenido ingresos en 2022 tienen obligación de hacerlo, siempre y cuando sus ingresos hayan sido superiores a 22.000 euros anuales. Si has tenido varios pagadores, el importe mínimo desciende hasta 14.000 euros. Hay algunas excepciones, por lo que lo mejor es siempre asegurarnos.
También conviene conocer todas las opciones que hay disponibles para hacerla y pensar cuál hará que nos sintamos más seguros o cuál nos da más confianza.
La primera de las opciones es hacerla de manera telefónica, con cita previa, para que Hacienda se ponga en contacto contigo, otra opción es acudir de manera presencial a sus oficinas, también con cita previa. Podemos confiar en el buen hacer de un profesional externo, al que se contrata para ello, o también hacerla nosotros mismos de manera online, a través de Renta Web.
En este servicio digital, la Agencia Tributaria pone al servicio del usuario un borrador de la declaración, que puede ser modificado o validado.
Este borrador se puede conseguir con el DNI electrónico, la Cl@ve PIN o número de referencia. Si quieres obtenerlo a través de la Cl@ve, tendrás que registrarte previamente, algo que se puede hacer en las oficinas o a través de internet, aunque lo mejor es hacerlo con tiempo. Para obtener el borrador, será necesario introducir el número de DNI y la fecha de validez.
Para obtener el número de referencia, por defecto, la web solicita que se introduzca el importe de la casilla 505 de la declaración anterior, al ser esta la primera vez que se va a hacer, lo que corresponde es ingresar los cinco últimos números de una cuenta de la que se sea el titular.
Una vez que tenemos nuestro número de referencia, ya se podrían modificar los datos fiscales y también tramitar el borrador. Lo más importante es no aceptar el borrador sin asegurarnos de que todos los datos son correctos y estamos conformes con el resultado.
Consultar el borrador no implica aceptarlo, podemos solicitarlo y, si todavía tenemos dudas que resolver, solicitar cualquiera de las otras opciones a las que hemos hecho referencia antes, ya sea acudir a las oficinas para que uno de sus trabajadores se asegure de que todo es correcto y nos explique las dudas que podamos tener o solicitar la opción de hacerlo de manera telefónica. Tener dudas con respecto a la declaración de la Renta no es una buena idea, al fin y al cabo es un proceso que tendremos que repetir al año siguiente, por lo que es mejor tener claro qué tenemos entre manos.