Los beneficios de usar la bicicleta son numerosos y abarcan diferentes aristas de un país, pero sobre todo, en la vida de una persona. Desde ahorro de dinero, hasta una colaboración con el medio ambiente por la falta de emisiones, la salud también se ve premiada por hacer ejercicio diariamente, y el aumento de su uso, es lo que el Gobierno español ha tratado de implementar desde junio de 2021.

La Estrategia Estatal de la Bicicleta fue un plan presentado y aprobado en junio 2021 por el Gobierno y el Consejo de Ministros, y consiste en la primera iniciativa de transporte que proponía modificar la estrategia fiscal para que las compañías incluyan el uso de la bicicleta para ir al trabajo como parte de la renta, al igual que ya se lleva a cabo con los coches corporativos, pero aún en Hacienda y Trabajo no existe ninguna reforma en agenda para llevarlo a cabo.

Pese a que las medidas que dominan el panorama actual son las subvenciones estatales al transporte público e incluso ayuda estatal para el combustible, este proyecto presentado hace más de un año, tiene como objetivo priorizar a el uso de la bicicleta como principal elemento de transporte, por sobre el el público y por último el coche privado. En este plano, dentro de las medidas que se pusieron sobre la mesa en el proyecto son formación en educación vial y el uso de la bicicleta, crear una red de infraestructura estatal de bicis, aumentar los aparcamientos de estas en los espacios públicos y privados y sobre todo, que las compañías las incluyan dentro de la renta.

En 2020, la DGT lanzó un 'Barómetro de la bicicleta en España' y desveló que 20 millones de españoles utilizan con frecuencia, mientras que solamente un 3,5% la utiliza diariamente, para ir a trabajar, es decir 1.5 millones de personas la usan. Cada vez más este medio de transporte está más presente y es una tendencia que va en aumento en relación a los años anteriores.

En Europa ya son varios los países que han implementado el uso de la bicicleta como un mecanismo crucial y principal para la movilidad en las ciudades, es por ello que muchas de sus medidas fiscales están enfocadas a beneficiar a aquellos que las utilicen de manera retributiva tales como Países Bajos, Alemania y Dinamarca.

Actualmente, Países Bajos, el país en donde el 70% de su población utiliza la bicicleta, ha subido la subvención estatal, de 19 a 21 céntimos, por kilómetro en bici que, dependiendo la distancia recorrida, se pueden acumular más de 1000 euros al año, al igual que Francia que también puede ofrecer una suma de más de 800 euros por año. Es así como, en Países Bajos, el Gobierno subvenciona con 21 céntimos a todas las personas que utilicen la bicicleta como medio de transporte entre su hogar y su lugar de trabajo, a partir de 2024 ya que los 19 céntimos son una tarifa que lleva congelada desde el 2006. Esta subvención se paga a través de las nóminas y no posee ningún impuesto agregado, pero si alguna empresa decide pagar más de 21 céntimos debe tributar por ello.

En este plano, el Gobierno de Países Bajos también ha implementado una nuevo proyecto de la bicicleta llamado 'Plan de la Bici', que ayuda a la adquisición de estas reduciendo sus precios y a través de la obtención de beneficios fiscales al comprarlas a través de las empresas. Es decir que, el trabajador que compre una bicicleta nueva, que puede utilizar para ir al trabajo como para su vida privada, debe pagarla a su empleador con su salario bruto con beneficios fiscales del 40%. El seguro y la manutención no forman parte de los impuestos.

A la vez, las compañías pueden decidir la forma de devolución del coste de la bicicleta y deducir su compra del impuesto a las ganancias. Por el otro lado, las personas que se adhieran al plan no contarán con la retribución económica de 21 céntimos anuales por su utilización.