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Un hombre gana el "campeonato de estar acostado" tras 60 horas tumbado boca arriba

  • Un hombre ganó el 'Campeonato de estar acostado' por haber estado tumbado boca arriba durante 60 horas en Montenegro

  • La competición permitía ir al baño cada 8 horas y tener un artefacto de entretenimiento

  • Es la 12ª edición del campeonato y el récord lo tiene una mujer que pasó 117 horas tumbada

El 'Lying Down Championship' lleva más de una década celebrándose en Brezna, un pequeño pueblo en Montenegro. Es así como en aquel rincón del país se premia a las personas por estar tumbadas la mayor parte del tiempo posible, y en esta 12ª edición fue un hombre llamado Zarko Pejanovic quien se llevó galardón por haber estado acostado boca arriba durante 60 horas.

Junto con un colchón, una manta y a los pies de un silencioso árbol, los 8 participantes se prepararon para competir unos a otros por quién podía pasar más tiempo en posición horizontal. Dentro de las reglas, a los concursantes se les permitía ir al baño cada 8 horas y tener algún dispositivo como el móvil o un artefacto de entretenimiento durante el tiempo para hacerlo "más llevadero".

En este contexto, antes de que se implementara el permiso de ir al baño, el récord lo obtuvo un hombre que pudo mantenerse sin ir al baño y tumbado por 52 horas. Pese a que el vencedor en esta ocasión fue Pejanovic quien asegura que "fue fácil y ni siquiera tuvo que calentar", con la regla del baño, el récord lo tiene una mujer llamado Dubravka Aksic quien pudo mantenerse acostada durante 4 días y 21 horas (un total de 117 horas).

El premio de la competición consiste en 350 euros, una cena para dos personas, un fin de semana en un hotel rural y una experiencia en rafting. El creador de esta popular competición fue Radoje Blagojevic, quien lo hizo para burlarse del famoso estereotipo cultural de la vagancia de los montenegrinos.

Horas después de haberse llevado el éxito, el joven fue noticia nuevamente al ser detenido por la policía por haber agredido a unos periodistas quienes lo etiquetaron como "el mayor estafador de Montenegro", por su título obtenido.