El ciclismo es uno de los deportes más sanos que se pueden practicar: disfrutas de entornos privilegiados, liberas endorfinas por un tubo y mejoras tu salud sin contaminar el medio. Hace ya diez años que la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió que el 3 de junio se convirtiese en el Día mundial de la bicicleta. Con esa jornada pretenden reconocer “la singularidad, la longevidad y la versatilidad de la bicicleta, que lleva en uso dos siglos, y que constituye un medio de transporte sostenible, sencillo, asequible, fiable, limpio y ecológico”. Lo cierto es que ya sea solo, con amigos o familia, el ciclismo es una apuesta segura para mejorar un día cualquiera. Pero, ¿y si también pudieses practicarlo con tu perro?

El bikejoring es un deporte que consiste en correr con el perro y la bici a la vez, y que cada vez gana más adeptos. A grandes rasgos, a la mascota se le coloca un arnés que va unido a una cuerda, a su vez atada a la bici. La idea es que el perro vaya por delante y marque el ritmo de la bici, aunque para ello el animal debe tener buena salud y estado físico. Los perros mayores o en estado de crecimiento, así como los enfermos, no deben practicar este deporte. Además, determinadas razas son más adecuadas para practicarlo con otras. Te lo contamos en Yasss.

Hay razas más apropiadas para practicar este deporte. Antes de comenzar a ejercitarte con tu perro, lo mejor es llevarle a vuestro veterinario para que le haga un chequeo de su estado de salud. Háblale de tu propuesta y lleva apuntadas todas las preguntas que te puedan surgir.

El bikejoring necesita perros de razas atléticas y fuertes: a fin de cuentas, el perro carga con parte de tu peso durante un trayecto más o menos largo. La recomendación es que sean perros de razas grandes o muy grandes (a partir de los 30 kilos suelen ser capaces de llevar al ciclista sin provocarse lesiones u otros problemas de sobreesfuerzo). Habrá que descartar los perros de raza mini y pequeña, por razones lógicas, y también los perros más ancianos, en los que este deporte puede agravar problemas articulares.

Por esa misma razón, los perros de razas con el hocico chato no son aptos para practicar este deporte, ya que tienen dificultades para respirar. Es decir, si tu mascota es un bóxer, un bulldog o un Boston Terrier, entre otras razas, tendrás que buscar otro deporte que podáis practicar juntos.

Las mejores razas para este tipo de ejercicio son los perros nórdicos, ya que son capaces de tirar de un trineo en condiciones climatológicas adversas. Son perros acostumbrados al arrastre y al tiro, como el Greyster o el Husky siberiano, muy atléticos y con cuello y cabezas fuertes, que les permiten cargar con la bicicleta en un paseo sin lesionarse o asfixiarse.

El Border Collie, el Pastor australiano o el brazo, por ejemplo, también son buenas razas para practicar el bikejoring, por su morfología. Ahora bien, esto no significa que debas llevar al límite a tu mascota: es mejor no llegar que pasarse. Evita practicarlo en días excesivamente calurosos o fríos y recuerda utilizar un arnés específico para este deporte. Así, tu perro no se dañará con los tirones de la bicicleta.

Poco a poco, id practicando hasta que podáis alcanzar una forma física en la que los dos estéis cómodos. Y si, con el transcurso de los días y los paseos, no ves que tu perro disfrute, lo mejor es dejarlo. ¡Hay muchos otros deportes seguros e igual de divertidos que podéis hacer juntos!