No es nada raro ver a un perro rascarse. Es un acto bastante característico de los canes. Entre su pelaje, a veces, se mete arenilla o partículas que les molestan, o bien, se rascan como lo hacemos los humanos, porque simplemente tienen picores. El problema puede venir cuando el perro empieza a rascarse de manera muy frecuente y con mucha intensidad. En este momento habrá que observar bien al perro para conocer la razón por la cual se ha empezado a rascar más de lo que habitualmente venía haciendo.
No todos los perros tienen el mismo pelaje ni la misma piel, por lo tanto, no todos ellos necesitan los mismos cuidados. Hay épocas en las que algunos perros mudan el pelo, y otros, a los que en algunas estaciones del año es muy recomendable córtaselo para que no les moleste y les vuelva a crecer con más fuerza. Por eso, hay que saber bien qué tipo de cuidados personalizados necesita nuestro perro. Es conveniente acudir a un veterinario, para que, según su tipo pelaje y su piel, nos diga cómo tenemos qué hacer las rutinas de cuidado recomendadas -para que el perro no sufra problemas de cualquier tipo en el futuro-.
Una de las causas más frecuentes de un picor recurrente en los perros es que los cuidados que está recibiendo no son los más adecuados para. Mantener un cuidado continuado y regular, hace que este problema no aparezca, o al menos ayudamos a prevenirlo.
La caspa en los perros puede aparecer por diversas razones. La más común, y con una solución más fácil, es que el perro esté recibiendo baños de más o de menos. Algunas veces al bañar al perro, sin saberlo, no estamos usando el champú recomendado –nunca se puede usar champú o gel para la limpieza del perro–, o no estamos haciendo un aclarado correcto para que no se quede nada de espumilla entre el pelaje, algo que puede ser muy molesto. Hay que tener especial cuidado con las colonias para perros porque –aunque, nos parezca una gran idea que nuestro perro huela bien–, puede que no les vaya bien para su piel. Los productos de higiene canina que contienen talco hay que intentar evitarlos, pues este producto no tiene buena reputación en lo que al cuidado de la salud cutánea del perro se refiere.
Para ello, habrá que crear una rutina adaptada al tipo de cuidado que el perro necesita según sus características y su raza, así como, peinarle regularmente para ir eliminando las células muertas de la piel. Además, peinando a nuestro perro asiduamente, podremos ir observando cómo esta la salud de su pelo y de su piel.
Esta caspa también puede ser debido a una mala alimentación o una alimentación escasa en algunos nutrientes necesarios para que pueda lucir un pelaje y una piel sanos. Para evitar la aparición de la caspa, en este caso, hay que prestar atención a que la alimentación del perro sea rica, sobre todo, en proteínas, ácidos grasos esenciales, como Omega 3 y vitamina A. La grasa de pescado ayuda a mantener la piel de los perros saludables, es muy conveniente añadirla a su dieta para que la caspa no se manifieste. Por lo que es fundamental que el perro tenga una alimentación adecuada a su tamaño, su peso, su raza y a la cantidad y el tipo de ejercicio que este haga.
Los cambios bruscos de temperatura son otro factor que puede influir en la aparición de caspa en los perros. Ambientes muy secos o demasiado húmedos y calientes, pueden producir en su piel un exceso de grasa e incluso irritaciones en la piel.
En los supuestos más graves, la caspa en los perros también puede aparecer por enfermedades, infestaciones parasitarias o alergias. En estos casos, lo primero que hay que hacer es acudir a su veterinario para que pueda investigar cuáles son las causas que le producen al can esa caspa y picores. Solo cuando el veterinario determine qué es lo que produce esa caspa, descamación, picores, e incluso, perdida del pelo, habrá que empezar a poner remedio. Si se trata de una afectación de su salud física, habría que medicar a nuestro perro o darle ciertas cremas o pomadas recomendadas para remediar ese problema.
En otras ocasiones, si la caspa en el perro se ha producido por las causas menos graves que anteriormente hemos enumerado, una manera de poner solución inmediata podrían ser los remedios naturales, como untar aceite de oliva por todo su cuerpo o sobre las zonas más afectadas, o aplicarle al perro vinagre de manzana sobre las zonas irritadas -para que se vayan aliviando los picores y se vaya curando poco a poco-. De todas formas, esto no será suficiente si no damos con la causa que produce la caspa y cambiamos esas rutinas de cuidados y alimentación equivocada. Pero siempre, si vemos algo que no nos parece normal o que altera la salud de nuestro perro, lo mejor es ir al veterinario para que nos diga qué es lo que pasa al perro y cómo podemos combatirlo de la manera más exitosa.