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Test de vaguería: ¿quieres saber cuál es tu nivel de pereza?

  • Posponer tareas por pereza no es malo siempre que no se convierta en rutina

  • Responde a nuestras preguntas y averigua cómo de perezoso eres

La pereza es un comportamiento valorado de forma negativa a lo largo de la historia de la humanidad. Cuando una persona dice que tiene muchas ganas de hacer algo, pero termina por no hacerlo, lo más seguro es que detrás se esconda un nivel de pereza impresionante. Pero, ¿es tan mala la pereza? En la religión cristiana la pereza es uno de los siete pecados capitales, pero siempre que no se convierta en una rutina puede ser beneficiosa.

Aunque se crea que la pereza es un comportamiento negativo del ser humano, también está presente en los animales y si no, que se lo cuenten a los koalas, los osos perezosos, los osos panda o los gatos, que duermen entre 13 y 22 horas diarias. Además, seamos sinceros, ¿a quién no le ha dado pereza la vida después de una resaca? Si hasta da pereza cumplir con los propósitos de año nuevo.

Así que en Yasss queremos saber si eres de los que procastina a diario todo lo que puede y más o de los que solo pospone sus tareas en momentos puntuales. Mide tu nivel de pereza respondiendo a las preguntas de este test. ¡A jugar!

¿Cómo dejar de ser perezoso?

¿Eres de los que se pasa medio día durmiendo? ¿No sales apenas de casa? ¿Te cuesta concentrarte o pensar en unos objetivos claros? Entonces lo más seguro es que te haya salido que eres una persona muy perezosa en el test de arriba. En Yasss te traemos unos consejos para dejar de ser tan perezoso y empezar a ser un poco más activo:

  • Descansa: dormir bien es un paso fundamental. Si no has descansado bien no podrás concentrarte ni tendrás la energía suficiente para realizar actividades. Y ojo, decimos descansar bien y dormir lo suficiente, no tirarse en el sofá o en la cama todo el día sin hacer nada, ¿eh?
  • Ponte una meta: no pienses en qué harás, ¡ponte a hacerlo! Determina un objetivo claro y conciso con el que avanzar poco a poco y por el que tengas pasión. Puedes ponerte rutinas o dedicarle un tiempo cada día para esa tarea. Además, puedes dividir tu gran meta en pequeños objetivos para que se te haga más ameno.
  • No te distraigas: es fácil decir que vas a tomarte un descanso de cinco minutos y acabar varias horas mirando las redes sociales, viendo la televisión o jugando un videojuego. Aléjate de todo lo que te resulte tentador (sí, incluido el móvil) para que el trabajo no se te haga cuesta arriba por tener entretenimiento a tu alrededor.
  • Fíjate en tus progresos: la gratificación de haber conseguido algo con los frutos de tu esfuerzo es un sentimiento de alegría que llena al ser humano. Por supuesto que tendrás que hacer sacrificios por el camino, pero lograr el objetivo que te hará feliz no tiene precio. Nunca permitas que nadie ni tu pereza te impidan alcanzar tus sueños.