¿Te imaginas tener en casa algún objeto que valga 38.800 y no ser consciente de ello? Pues esto es lo que le ha pasado al británico Nigel Brookes que se ha dado cuenta recientemente de que tiene una pieza de coleccionista valorada en 35.000 libras, es decir, unos 38.800 euros.
Sin ser muy fan de Pokémon, su madre le regaló una colección de cartas de la serie en 1999, como recompensa por haber ayudado a su hermano pequeño, Jeremy, cuando otros niños intentaban engañarle para intercambiar sus cartas únicas por otras que no tenían tanto valor.
"Mi hermano llegó a casa entusiasmado con la carta nueva que había intercambiado con otros niños en la calle. Me di cuenta al momento de que los niños le habían dicho a mi hermano que sus cartas eran mejores y él les había dado las suyas, que realmente eran únicas. Así que mi hermano se entristeció cuando se lo expliqué y mi madre quiso que yo hiciese de hermano mayor y lo solucionase", ha contado Nigel a Unilad.
Ahora, sin saberlo, estas cartas que le regaló su madre hace más de 20 años como agradecimiento, que formaban parte de una edición limitada de Estados Unidos, se han revalorizado hasta el punto de convertirse en una auténtica pieza de coleccionista.
Teniendo en cuenta que Nigel nunca ha sido fan de Pokémon, ni siquiera lo era cuando su madre le regaló las cartas, en cuanto se enteró de lo que estas podían costar decidió ponerlas a la venta para que así algún coleccionista pueda ocuparse mejor de ellas.
Y es que, si ya no quería tenerlas cuando su madre se las regaló por su cumpleaños, llevándose una decepción enorme porque ese año fue lo único que recibió, mucho menos quiere seguir manteniéndolas ahora sabiendo el dinero que puede ganar con su venta.
Es por esto que Nigel ha decidido subastar el próximo lunes 27 de julio su colección de 103 cartas producidas por los creadores 'Wizards Of The Coast' en Estados Unidos. La venta la gestionará Richard Winterton, del Centro de Subastas de Lichfield (Inglaterra), quien ha afirmado que el coste estimado de la colección, considerada como "el Santo Grial de los aficionado de Pokémon", oscila entre las 25.000 y 35.000 libras.
¿Y si en vez de venderlas ahora espero 20 años más para que cuesten el doble? Este fue uno de los pensamientos que se pasó por la cabeza de Nigel cuando tomó la decisión de subastarlas. Al final, aunque no le fue fácil decidirse, optó por venderlas ahora para poder disfrutar de ese dinero durante la infancia de sus tres hijos y, además, asegurarse así de que las cartas no se estropeen o se pierdan.