Desafíos visuales, ilusiones ópticas y hologramas: llega el Museo de las Ilusiones a Madrid, un lugar donde cualquier cosa que puedas ver te parecerá más propia de una película de ficción que de la vida real. Entre la Puerta del Sol y Lavapiés (en la calle Doctor Cortezo, número 8) se encuentra el nuevo museo de la capital española que está encantando tanto a los más mayores como a los más pequeños.

Atravesar sus diferentes estancias es como sentirte en medio de una ficción absolutamente surrealista. Tendrás que mirar una y otra vez a todas partes para intentar entender las ilusiones ópticas tan complejas que, por mucho que te frotes los ojos, se escapan a nuestra mente. Y no solo mirar, este museo rompe con el típico "se mira, pero no se toca", ya que invita a sus visitantes desde un primer momento a tocar, experimentar y jugar durante todo el recorrido.

En las diferentes salas de este museo puedes encontrarte desde las experiencias visuales más "típicas" o reconocidas como el famosísimo caleidoscopio hasta las ilusiones más novedosas como el Túnel del Vórtice (en el que tienes que intentar pasar de un extremo a otro sin agarrarte, ya que aunque sabes que no te estás moviendo, la sensación que experimentas es justo la contraria), un cuarto antigravedad (donde tu cuerpo y tu mente discutirán sobre si estás en una superficie plana o inclinada), una habitación infinita y hologramas.

Esta última parte, la de los hologramas, es la más tranquilita de todo el museo. Después de tantas experiencias y sensaciones increíbles no viene nada mal relajarse un poco al final. En ella podemos disfrutar de caras huecas que se convierten en ojos que te siguen por la sala, imágenes planas que parecen tener tres dimensiones y hologramas que parecen tener vida propia. ¡Pura fantasía (visual)!

Además, podrás hacer fotos sin ningún problema, de hecho algunas ilusiones se basan en lo que vemos a través del objetivo, así que es casi obligatorio que las hagas. Por tanto, que no se te olvide traer tu teléfono móvil con la batería a tope y con mucho espacio en la memoria.

No obstante, no todo es fantasía y buenas noticias. Quien vayan ahora el museo no podrá disfrutar de su Salón de Juegos inteligentes, ya que permanece cerrado como medida de seguridad por la crisis sanitaria del coronavirus. Esta es su única estancia cerrada, debido a que para poder participar en ella tienes que tocar sus puzzles, rompecabezas, juegos de construcción y nudos imposibles.

Con el de Madrid, ya son 18 los museos de las ilusiones repartidos por todo el mundo. Todos ellos pertenecen a una marca internacional que nació en 2015 en Zagreb, Croacia y que en tan solo cinco años ha conseguido abrir sucursales en Nueva York, Shangái, Kuala Lumpur, Toronto, Dubái, Orlando, París, etc. No obstante, y según deja claro el Museo de las Ilusiones de Madrid en su página web, "cada colección es única".